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Su ultimo día, los días habían pasado mas rápido de lo que ambos quisieran, pero si podían decir y hasta asegurar que a pesar de no poder salir a ningún lugar habían aprovechado el tiempo al máximo.

Mark desde el marco de la puerta de la cocina miraba a su pequeño y hermoso girasol cocinar mientras movía sus caderas al ritmo de la música, era su ultimo día juntos, cuando la noche se hiciese presente todo cambiaria tanto para ellos como para los de su alrededor — ¿Qué tanto miras canada? — pregunto el moreno terminando de preparar el desayuno.

— Miro a mi hermoso novio cocinar por ultima vez — respondió recostándose en él — Me hubiese gustado tanto casarme contigo — soltó sonriendo al imaginarse a su pequeño en un traje blanco.  

— Ami también amor — dijo mirando el hermoso anillo que descansaba en su dedo anular, el silencio los rodeo al igual que los sentimientos que recorrían por sus cuerpos — Adoptar un pequeño o mejor aun tenerlo — expreso metiendo su dedo en la leche condensada.

— ¿Si sabes que tu sueño de tener un pequeño demonio solo existe en los manhwas que lees? — pregunto casi burlón.

— Admítelo gaviota te encantaría tener un hijo conmigo — el mayor se quedo en silencio ante lo dicho por su novio, admitía que le encantaría también, el mimarlo, el cuidarlo a mas no poder, el saber que un pequeño seria de ellos, llevando un poco de cada uno — Ves que si idiota — dijo caminando hacia la nevera aun con el canadiense detrás suyo abrazándolo como su él fuese un peluche.

— Lo admito, pero es imposible — respondió callando al ver como su nene partía las fresas.

[......]

Mark miraba con una mano apoyada en el vidrio de la ventana como el sol se ocultaba dejando que la luna hiciese su aparición, su moreno se estaba terminando de bañar, sonrió al ver su reflejo, tenia varias marcas y mordidas que ahora estaban moradas  — Y pensar de no soportar te en un principio te convertiste en mi mejor amigo y ahora eres mi pareja — dijo en alto al ver lo increíble e impredecible que podía ser la vida con todos.

— Makku, Malk, Milk — sonrió de lado al ser llamado por su personita especial — Mira amor soy un fantasmita — chillo demasiado emocionado y tierno mostrándole la enorme camisa que llevaba puesta — Y digo "Buuu" — estiro sus brazos y piernas, el canadiense quiso reír, realmente quiso reír o al menos sonreír pero no pudo, una mueca de dolor y tristeza de apoderó de su rostro donde las lagrimas eran el complemento perfecto para mostrar su dolor.

— Perdóname — dijo muy bajo al no querer soltar algún sollozo — Fui un estúpido por creer que ellos nos aceptarían — sus rodillas cedieron tocando el piso de madera — Si no te hubiera convencido nada de esto hubiera pasado — sus manos cubrieron su rostro dejando que sus mismas lagrimas las mojaran.

Donghyuck humedeció sus labios con la lengua acercándose y agachándose — No amor, N-No tie-enes porque di-isculparte — sus lagrimas acompañaban a las del mayor, sus delgados brazos lo rodearon con mucho amor — E-Estamos juntos — respiro profundo antes de quitar las manos del mayor y acunar su rostro — Siempre lo estaremos cariño — quiso al menos mostrar una pequeña sonrisa de las que tanto amaba su novio sin embargo su cuerpo no colaboraba al mostrar una triste. 

La tristeza que habían acumulado a lo largo o corto de esos dos meses había explotado, ambos justo antes de entrar al piso que se les había asignado se prometieron dejar el dolor y la tristeza de lado dejando solo la alegría, amor y felicidad de podían darse sin embargo ahí estaban en el piso con las manos tomadas llorando a mas no poder dejando que sus corazones y almas se liberaran por completo, les dolía, toda esta situación les dolía, pero sabían y harían que terminase. 

El inicio de un eterno Amor - MarkhyuckDonde viven las historias. Descúbrelo ahora