Nothing to loose

Anything

Llegué con ellos, el cocinero no se veía tan aterrador de cerca.
-El es Jack
Dijo ella mientras lo señalaba con la punta del dedo.
-H-hola...
Extendí mi mano para saludarlo, pero el se hizo hacia atrás.
-Perdón, no me agrada el contacto físico con desconocidos.
-Oh... Lo entiendo
Regresé mi mano a su posición original, esta vez habló mi acompañante.
-Vamos, no seas tan duro con el, de hecho, hubieras visto el salto que pegó allá abajo en las mesas de billar.
-Bueno, bueno, haré un esfuerzo.
-2 órdenes de lo de siempre.
-Claro, ya vengo.
Pasados unos 10 minutos Jack llegó y extendió dos platos con comida hacia nosotros, yo tomé el mío sin mirar su contenido y sólo caminé hacia la primera mesa que vi, la chica me seguía por detrás. Finalmente, me senté y puse el plato enfrente de mi, por fin caí en cuenta de lo que tenía enfrente; aún caía algo de grasa por la carne de la hamburguesa y las papas estaban algo quemadas.
Después de unos segundos en silencio por fin habló la chica que acababa de conocer hacía media hora.
-Hey, lo que está ahí, va en tu boca
-No puedo...
-¿Por?
-Soy vegetariano...
-¡¿Qué?! No, eso es imposible.
-No tiene nada de malo
-Tal vez eres así porque aun no pruebas la comida de aquí, anda, dale una mordida, si no te gusta, te compro un helado después.
Después de pensarlo bien, la comida no tenía tan mal aspecto, existía la posibilidad de que no muriera, tomé la hamburguesa entre los dedos y la acerqué a mi boca para luego hacer hacer una pausa.
-Así que... ¿Un helado?
-Si
-Bueno.... Adelante
Di la primera mordida..... Y.... Oh por dioh, era lo mejor que había comido en años. Volteé a verla y tenía una gran sonrisa en su cara.
-¿Entonces...?
-Debí haber venido antes
Sonrió más.... Era muy guapa.
-Te lo dije, eras vegetariano porque nunca habías comido en este lugar
-Cállate y dame un poco de tus papas
-Claro, tómalas.
Empujó el plato hacia mi, yo solo seguía devorando mi alimento, porque, en verdad, era rico. Di un mordisco más y PUF, ya no quedaba nada. La pelirroja me veía sorprendida.
-¿Qué?
-No, nada, acabaste muy rápido.
-Calla...
-Je...
Movió el fleco hacia un lado con los dedos y demonios, en realidad era muy linda
-Oye, no me has dicho tu nombre
-Ah... Si... Me llamo Allison... Tu tampoco me has dado el tuyo
-Anthony... ¿Te molesta si te digo Allie?
-No, para nada
-Bueno, ahora, cuéntame un poco más sobre ti
-¿Estás seguro que quieres saber sobre mi?
-Si
Se acomodó en su silla y me miró con seriedad.
-Prepárate, esto va a ser muuuy largo...