1° Reglas

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Pov Sparta

Fin de semana donde podría estar durmiendo hasta tarde pero no...

Estoy limpiando el desastre de un demonio, literalmente.

- Raptor porfavor quedate quieto -pedi mientras limpiaba el desastre que hizo en mi baño y el rebuscaba por toda la habitación con el tamaño de un niño, suspire cansado-

Raptor habia tirado sin querer una de mis masetas que habia puesto en el baño porque es el unico lugar donde Victor no puede entrar por lo tanto no lo usaria para practicar su puntería, que es muy mala por cierto, y por alguna razón se quedo en el tamaño de un mocoso.

- Porfavor quedate quieto, no quiero que rom- -se escucha como se rompe algo- ...-pas algo... otra vez -

Quien me manda a recibir a una plaga en mi casa...

Todo sea por la venganza...

- Lo siento... -se disculpo mirando el nuevo desastre que hizo-

- No hay problema puedo arreglarlo luego pero al parecer dejarte solo no es una opción -susurre lo ultimo- oye una pregunta, ¿porque estas al tamaño de un mocos-digo de un niño? -

- Me gusta estar así, es más comodo y me es más facil moverme o esconderme -se sentó en el suelo- ¿que este en este tamaño le molesta? -

- Es raro tener a un niño corriendo por mi habitación -confese-

- ¿Así esta bien? -pregunto tomando el tamaño de un chico de unos 15 o algo por ahí-

- Si, pero ponte la ropa que te di antes -le tendi la ropa, la tomo para entrar al baño- ten cuidado de no romper nada -le adverti-

Mire el nuevo desastre que hizo, suspire cansado, me quite la polera que se habia ensuciado porque tenia calor y me puse a limpiar nuevamente.

Luego de un rato salio Raptor ya vestido se me quedo viendo un rato y entre abria la boca como si quisiera preguntarme algo, lo ignore hasta que por fin hablo.

- Etto... ¿yo tambien puedo hacerle preguntas, Amo Sparta? -

- Llamame Sparta y si, pregunta lo que quieras -

- ¿Que le paso en sus brazos, Sparta? -me quede quieto un rato-

¿A que se referia?, Miré mis manos y eran unos moretones, no me había dado cuenta de eso.

- Ah... te refieres a esto, no es nada solo fueron unos idiotas que me molestaron en la escuela -respondi sin tomarle mucha importancia-

Despues de todo ya habia encontrado la solución a mis problemas.

- ¿Quiere que me encargue de ellos? -Pregunto serio pero se le notaba nervioso y algo asustado agarraba con fuerza el borde de la polera que tenia puesta-

No entiendo porque se pone así, si es un demonio debio ver peores cosas ¿verdad?

- Eso será luego, ahora tengo que enseñarte lo que puedes y no puedes hacer mientras te quedes conmigo -deje de limpiar y agarre un lápiz una hoja para dárselas pero dude un momento- ¿Sabes escribir, verdad? -

•°Pequeña plaga°•《Spartor》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora