𝑪𝑶𝑳𝑫 - 𝑱𝒖𝒏𝒐

I

- ¿Cuándo vas a llegar? – Lee Chan, de 22 años, estaba echado en su cama compartida con su novio, con el que ya lleva 4 años de relación, Wen Junhui de 24 años, pero solo le decía Jun.

El pequeño rubio miraba el techo, ya eran las 7 de la tarde y se supone que Jun llegaba a Corea a las 5, fue a China por la boda de su hermano y ya tenía una semana estando allí.

Ambos eran muy diferentes, Chan media 1.70 era adorable y le gustaban los colores pasteles, libros, dulces y películas románticas, era cariñoso y le gustaba mucho mantener contacto físico. Mientras que Jun era todo lo contrario, media 1.87 y su actitud era fría, el típico "rompe corazones" en la universidad, le gustaba vestir ropa oscura, le gustaba lo salado y picante, era un chico de videojuegos y películas de terror y suspenso.

Eran tan diferentes que se complementaban a la perfección, habían muchas personas que quieren ser Chan para estar con Jun y a la misma vez Jun para estar con aquel adorable chico.

Ya llevaban casi tres años viviendo juntos desde que formalizaron su relación, dormían juntos, aunque Chan era cálido, se resfriaba con facilidad y Jun siempre tenía sus manos frías, pero casi nunca se enfermaba.

Jun respondía frío, su cara casi siempre era de pocos amigos y usaba malas palabras frecuentemente, pero con Chan, oh, aquel dulce chico que gracias Dios es su novio, ese chico lograba doblegarlo fácilmente.

-Ya deberías estar aquí- el pequeño rubio pataleó en su lugar, resignado se levantó y se alisto para darse una ducha.

Y justo antes de entrar al baño, su teléfono sonó, era Jun.

- ¿Jun? - Chan atendió la llamada

- Chan, perdón por no llamarte antes o contestarte, es que mi teléfono murió y ademas perdí el vuelo, llegaré mañana a medio día.

- ¿Por qué perdiste el vuelo?

- Es que papá se confundió de camino y terminamos en Cangzhou en vez de Pekín.

- Bien, te veo mañana - y colgó, estaba algo enojado, podía haberse prestado algún teléfono y llamarlo para que no esté esas dos horas y media en extremo preocupado.

Pero ahora haría todo lo que a Jun no le gustaba que hiciera, caminar en casa de sin calcetines, dormir tarde y taparse con una sola sábana.

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-Sí, gracias - Chan cerraba la puerta a un repartidor de comida, acababa de pedir alitas con barbacoa, la tenía que comer con Jun,pues eran dos porciones,pero su novio no estaba y no podía desperdiciar buena comida.

Entro a Disney+ y empezó a reproducir Blanca nieves, amaba las películas clásicas animadas.

Su teléfono empezó a vibrar, varias veces después de salir de la ducha, pero lo puso en silencio ya que era Jun pidiendo perdón por no avisarle antes.

♡Junnie ♡

20:32 - Amor, realmente lo siento

20:32 - Por favor léeme

20:32 - Respóndeme o me mato, primer aviso

20:32 - No es cierto, pero ya perdóname, debí avisarte antes :(((

El menor bufo dejando su telefono silenciado en la mesita de la sala mientras las películas se reproducían y de un momento a otro ya era la una y de la mañana.

-Ay...no - le asustaban mucho esas horas, era muy supersticioso y le tenía miedo a muchas cosas, oscuridad, fantasmas, ruidos fuertes, esa clase de cosas.

Por eso en las noches, Jun siempre apagaba las luces de la casa, ya que a Chan le aterraba hacerlo; pero, ahora Jun no estaba con él, así que tendría que hacerlo quiera o no.

Tomo aire, su celular y empezó a correr justo después que apago las luces del recibidor.

- ¡Lo logre! - levanto sus manos cuando ya estuvo en su habitación, se cambió rápidamente a su pijama y como parecía que sería una noche calurosa, ni siquiera se tapó con alguna sabana, simplemente se durmió a las 2 de la mañana sobre aquella cama.

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El pequeño rubio despertó a las 9:48 de la mañana, con dolor en su garganta y un ambiente de 9 grados centígrados, se sentó en la cama y entonces su cabeza dolió, alcanzo su frente con su mano y estaba ardiendo.

Por esa clase de cosas debía hacerle caso a Jun, casi siempre tenía razón.

Chan aún con su cabeza doliendo y la fiebre cubriendo su cuerpo se levantó intentando caminar hasta la sala de star, ahí estaban los antigripales y cosas así.

Pero al pisar un escalón, lo hizo mal y se dobló el tobillo casi cayendo hasta el suelo nuevamente, si no se hubiera sostenido de la baranda, así hubiera sido.

Su cabeza daba vueltas y le dolía mucho, pero ya estaba por llegar al botiquín, donde, por karma quiza, no estaban los antigripales, parecían haberse acabado.

-Agh! - se quejó aun con el tobillo doliendo, no tenía más opción que volver a su cama y dormir con la esperanza de que el dolor se vaya.

Pudo subir las 8 escaleras con mucho dolor en su tobillo, pero cuando estaba por entrar a su habitación, su vista empezó a nublarse y perdió la percepción del espacio.

Cayo al suelo con muy pocas fuerzas en su cuerpo y es ahí donde su telefono empezó a sonar, alguien lo estaba llamando, seguramente era Jun, quería responderle, quería decirle que le dolía la cabeza, que no tenía fuerzas, pero solo podía estirar su mano.

-Jun... -se rindió sin volver a intentar pararse, sería un fracaso, así que se quedó en el suelo, con la fría temperatura en el aire y una alta en su cuerpo.

Odiaba enfermarse, siempre era así de débil y agitado.

Vuelve rápido por favor.