-Buen día- Jun acababa de despertar, ese era día del trabajador, lo que significaba que era feriado y que su venganza sería ese día.
-Buen día- Chan contestó besando cortamente sus labios.
Como Jun dijo, su venganza no sería cruel, era una llamada "no puedo dejar de besarte".
Solían besarse en la mañana, medio día, tarde y noche, pero hoy, Jun no dejaría a Chan escapar, hoy su pequeño duraznito estaría lleno de besos.
-Otro- Jun tomó su cintura, se posicionó encima y atrapó los labios de un adormilado Chan que intentaba seguir el ritmo de sus labios.
Beso tras beso hasta que Chan sintió que era suficiente antes de que la situación se descontrole.
-Vamos a desayunar- su respiración era agitada y como no si Jun no le dejaba tomar aire ni dos segundos.
-Otro más- quiso darle otro beso, pero Chan se escabulló por abajo huyendo de Jun.
-Vamos a desayunar- repitió con las mejillas sonrosadas mientras arreglaba su pijama.
Jun de todas formas encontraría la manera de volverlo a besar.
Y así fue, todo el desayuno, desde el proceso hasta mientras comían, este besaba la mejilla, frente, nariz o los labios de Chan, todo su rostro podía ser víctima de sus labios.
-Me voy a bañar- Chan pensó que con eso podría librarse de Jun, pero fue más rápido y lo tomo por las caderas impidiéndole salir de la cocina.
-Dame un beso- le dio la vuelta y beso sus labios.
Chan se sentía algo agobiado por tantos besos, Jun no acostumbraba a ser así.
- ¿Q-qué pasa? - se limpió los labios aprovechando que le dio un respiro- ¿Por qué estás así hoy?
- ¿No puedo besar a mi novio acaso? - atacó sus mejillas y después su cuello dejando algunas pequeñas y visibles marcas en su blanca piel, sus manos acariciaban Ia piel desnuda de su cintura causándole escalofríos al menor por lo frías que estaban.
-Iré a bañarme- de alguna manera logró escapar rápidamente corriendo hasta el baño cerrando con llave y poder prender Ia ducha.
En Ia ducha no podría atraparlo, ¿verdad? Error, Jun abrió la puerta del baño con una llave de repuesto que tenía. -Hey! ¡Estoy en Ia ducha! - intento cubrirse.
-Amor, no hay nada de ti que no haya visto- solo entró para lavarse las manos, pero aprovechó para darle un besito a Chan, lo dejaría bañarse tranquilamente después.
-Eres tan...- cuando Jun se fue, sus mejillas estaban calientes, pero tenía que terminar de bañarse.
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-Te amo- Jun besaba todo el rostro de un resignado Chan que estaba sentado en las piernas de su mayor.
-Sí, yo igual te amo, pero déjame levantarme- intentó otra vez, pero las manos contrarias estaban aferradas a sus muslos, supuso que lo que quedaba del día estaría en los brazos del contrario.
-No te levantarás, no te doy permiso para hacerlo- besó su mejilla bajando lentamente sus besos por su barbilla llegando a su cuello donde dejó cuatro marcas notorias mientras con una mano subía la sudadera contraria. -Hey... espera... -no tenía una buena excusa para escapar -tenemos... tenemos que lavar ropa.
Yo la pondré a lavar después, sólo quédate quieto- sobrepasaba las condiciones de la inocente broma... que ya no era tan inocente.
-Tengo que...- se encogió en su lugar, su novio mordió algo fuerte su cuello -tengo... que ordenar la sala.
-Lo haré más tarde- no lo de dejaría ir, no hoy.
-T-tengo que lavar los platos- sus brazos se sostuvieron del cuello de su novio.
-Tenemos lavavajillas- y se sacó la parte superior de la ropa.
-Tengo q-que...-
-Acéptalo, hoy te tengo- con una mano sostenía su cintura y con la otra acariciaba su muslo derecho -no tienes escape, cariño.
Y Chan ya sabía que su novio tenía razón, solo estaba retrasando lo inevitable.
No había parte de Chan que no haya sido explorada por los labios de Jun, conocía cada centímetro de él, desde la punta de sus pies hasta donde terminaba su cabello.
Y aunque Chan dijo "estoy cansado" varias veces, Jun solo contestaba con un "Una vez más" y en eso pasaron más de 5 horas, siendo ya 6 de la tarde.
-Lo siento- Jun abrazaba a su lindo novio que estaba envuelto en las sábanas hecho una bolita.
-Ni siquiera puedo ponerme de pie, dormirás en el sofá por cuatro días- habló dentro de su fuerte de sábanas. -Oh, no seas así, lo siento ¿sí? - no esperó ser botado de su propia cama de una patada.
-Bien... iré a la tienda, ya vuelvo- sabía lo que contentaría a su lindo novio, un bote de helado de choco menta, muchos alfajores de chocolate, leche de fresa, papitas fritas y una tarta de chocolate, sip, si no quería dormir en el sofá tendría que comprar todas esas cosas y tal vez, su querido novio podría perdonarlo.
Compró todo lo que sabía que a Chan le gustaba y regreso a casa en 20 minutos.
-Te traje esto...- le entregó la bolsa de papitas y Chan la agarró rápidamente metiéndola a su guarida -Y esto...- le entregó la caja de la tarta y la leche de fresa, pero Chan solo las agarraba sin decir nada más -También esto- le entregó 8 alfajores de chocolate con la esperanza de que sea suficiente, pero su lindo novio seguía sin decir nada-Y esto...- usó su última arma, helado de choco menta, 3 segundos después de que Chan se lo haya llevado por fin hablo -El choco menta te salvó...- habló desde adentro de su refugio -Guarda esto y esto por favor- se destapó entregando la bolsa de papas, los alfajores y la leche de fresa -y tráeme una cuchara, el choco menta no se come solo.
-Claro que si- hizo al pie de la letra lo indicado, su premio sería no dormir en el sofá.
Nota mental, a la tercera advertencia, hazle caso.
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Perdón por aparecer después de no se cuantos meses JAHSKJA

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𝑪𝑶𝑳𝑫 - 𝑱𝒖𝒏𝒐
FanficUn pequeño resfriado, en un pequeño cuerpo, Lee Chan se había destapado la noche anterior que su novio no llegó a casa por estar de viaje ¿Cómo reaccionará Jun al ver a su temblante novio con fiebre y escalofríos? -Te dije que te cuidaras. -Tú prome...