Podía ser un buen día.
Los cálidos rayos del sol y el suave viento golpeaban el rostro de la figura que caminaba con lentitud por el pasto.
El silencio en el lugar, por otro lado, parecía ser bastante lúgubre. O al menos así lo era hasta que el sonido de la tierra removiéndose bajo las zapatillas de Tom llenó el ambiente.
Podía sentir los latidos de su corazón estancados en sus oídos, acumulando una especie de nerviosismo y opresión dentro suyo.
Tenía razones para sentirse así, pero era mejor que lo olvidara. ¿Qué pensaría la gente si lo veía así?
Pero bueno, era su aniversario de pareja, ¿qué más podía sentir...? Después de todo, allí estaba él, cumpliendo su parte de aquella promesa que había hecho con su novio hace un tiempo atrás sobre reunirse para celebrarlo.
Inspiró profundamente. Estaba cerca y lo sabía.
Pronto vería a quien tanto deseaba tener a su lado, a quien tanto extrañó y extrañaba en ese momento, a quien tanto anhelaba volver a abrazar; nadie más que Tord Larsson.
Miró el ramo de rosas azules que meneaba entre sus temblorosas manos. ¿Había elegido bien?, ¿le hubiera gustado a Tord otro tipo de flores?
Negó con la cabeza. De seguro era una buena elección, después de todo, él mismo se le había declarado al contrario con una rosa azul.
Levantó la vista, volviendo a centrar sus ojos en el camino delante suyo que lo conducía a donde se encontraba el noruego.
Se decidió por caminar sin más, ignorando su nerviosismo y sus mil pensamientos pasando por su cabeza, así llegando finalmente a su destino luego de unos minutos.
Una mueca apareció en las comisuras de sus labios, intentando sonreír pero fallando en el intento. La verdad es que era un poco doloroso verlo luego de tantos meses separados sin haberlo podido abrazar o besar.
El trabajo de Líder Rojo le había consumido bastante, y no sólo tiempo, sino también horas de descanso y estabilidad, más aún el día que tuvo que liderar y mantenerse en el frente de la guerra de la cual le había comentado por teléfono.
Pero eran cosas del pasado, ahora todo era distinto. Los días agotadores donde Tord no podía descansar habían acabado, pues ya no era más el Líder Rojo.
Así que, sin perder más el tiempo y olvidando todos esos momentos, terminó acortando la poca distancia que les separaba.
Su boca se abrió con lentitud, sintiendo un nudo en su garganta:
──Toma, una flor. ──dijo finalmente en un susurro, arrastrando sus palabras y depositando una de las rosas azules en la tumba perteneciente a quien alguna vez, vagamente, había amado y a quien la guerra le había arrebatado.
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❛ blue. ٬٬ ❪❪ tomtord. ❱
Fanfic---- · 🍃 · ---- ➹ ❛ historia corta tomtord , tordtom. ➹ ❛ los personajes pertenecen a Edward Gould (Q.E.P.D) ➹ ❛ se prohíbe cualquier traducción, adaptación o plagio de esta historia. ➹ ❛ los nombres y shipps que aparecen en esta historia sólo hace...