4 de Noviembre 2019
Kate Johnson
Presente
— Hija ¿Que quieres cenar? — La voz de mi madre hizo paso desde la cocina, preguntando que queria cenar. La verdad no queria comer.
La señora que llamo mamá, habia vuelto hace tan solo 5 dias de su "viaje de trabajo". Había traido algunas joyas, maquillaje, ropa...En pocas palabras, había traido todo lo que a ella la hacía feliz. A su querida hija le habia algunas cosas tales como: maquillaje y un poco de ropa -Por lo menos se habia acordado de mi- y alguna que otra joya.
Me causaba risa ya que la noche en la que ella llego de su largo viaje, no tuvo la decencia de pasar por mi habitacion para confirmar si estaba en la misma o no. Solo se diriguio a su habitacion y no salio, ni se dio cuenta de mi presencia en la casa hasta la mañana siguiente.
A veces solía pensar en si de verdad mi madre aun me queria o solo me decia Te quiero por costumbre.
Baje las escaleras a paso lento, la verdad no estaba apresurada de llegar a la cocina. Me acerque a el marco de la puerta de la cocina y me recoste en este. Mi aspecto fisico ese dia en especifico, era uno de los peores. Tenia unos circulos violáceos bajo los ojos, una mirada cansada, y me dolia hasta respirar.
— Siendo sincera no tengo ganas de cenar... — Dije con un toque de indiferencia. Ella me observo preocupada.
No queria que mi madre sospechace de lo mal que la estoy pasando emocionalmente, ni mentalmente, y hasta fisicamente.
Asi que me retracte y volvi a abrir la boca para esta vez decir— Pero una tostadas de queso y aceitunas no estarian para nada mal — Agrege dandole una sonrisa, ella la correspondio.
Me di la vuelta dandole la espalda, y emprendi mi paso hasta uno de los muebles de la sala. Me sente primero en el, y luego para sentirme mas comoda, me recoste y termine acostada en el mismo. Estaba tan cansada, y exhausta que no podia ni mantenerme sentada. Estos dias habian sido muy ajetreados y complicados, mi mente no estaba pensando en comida. Ni en mas nada que no fuera el poder salvar a Kevin de la carcel.
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Reinicio: De el final
RomanceNo es simple olvidar tu voz, no es simple olvidar tu cabello, tu pelo... Olvidarte a ti. Aunque trate de alejarme, de no verte, no hablarte, tener contacto cero contigo. Pero siempre apareces, vuelvas a cruzarte en mi camino. Costó olvidarte pero ah...