Sanemi se encontraba rumbo a la casa de su novio.Lo único en lo que pensaba era en que quería verle,no le importo el estado en el que se encontraba,queria verlo a toda costa.
Tras llegar fue recibido en la recidencia del pilar de agua,por el mismo.Era demasiado temprano,aunque ya habia amanecido hacia unos cuantos minutos,el peliblanco se encontraba mal herido,pues había acabado recientemente una misión,y lo unico que quería era ver el hermoso rostro de su pareja.
–Nemi? Cariño,porque estas en tan terrible estado?–Dijo el azabache preocupado,puesto que si,era mas que obvio.Habia tenido una misión y por eso estaba en ese estado.Pero no comprendió porque no habia ido a la finca mariposa,antes de venir junto a el.
–Y-yo...,lo siento,no,no me encuentro bien.–Pronunció un tanto ruborizado y nervioso,si bien se encontraba fatal,lo había puesto nervioso el que él azabache lo llamase 'cariño',puesto que no se decian apodos tan cariñosos muy seguido.
El peliblanco se desvaneció, calló rendido sobre su novio,quien lo sostuvo entre sus brazos tras caer.–Nemi! Sanemi! Despierta!–Fueron las últimas palabras que Sanemi pudo escuchar antes de perder completamente la conciencia.
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Al despertar,el ojilila se encontraba en la finca mariposa,estaba siendo atendido por Kocho,quien se encontraba cambiando el medicamento del suero.
–Shinazugawa-san.–Dijo sorprendida a la vez que alegre la pelinegro.–Despertaste.–Luego de pronunciar aquello le dedico una sonrisa al contrario.
–Si,dime una cosa Kocho ¿Cuanto tiempo llevó aqui?–Le contestó el albino bastante sereno a decir verdad.
–Umm,unas dos...,no,tres semanas.–Dijo la menor llevándose su dedo indice a mejilla.
–¡¿Tres semanas?!–Eso era casi un mes!-pensó un tanto exaltado.
–Tranquilo,lo importante es que ya te encuentras bien,y me alegra,pero, sabes a quien mas le alegraría?–Dijo soltando pequeñas risitas.A lo que Sanemi quedó atontado.–A Tomioka-san.–Soltó en un tono burlesco.
–Que?!,porque dices eso,ese idiota pff,no quiero tenerlo cerca.–Dijo el mayor un tanto nervioso,pues que más? la menor le demostró que había estado sospechando algo.
–No lo ocultes Shinazugawa-san,es demaciado obvio.–Dijo en un tono relajado.–Crees que no me di cuenta de como se hablan,las constantes miradas,y los ratos a solas que quieren tener,todas esas son obvias señales.
–Kocho...¿que insinuas?–Soltó más nervioso de lo que ya estaba,la habian cagado.Si Shinobu se dió cuenta,era más que obvio que los demás tambien lo habian hecho,y si no, probablemente lo harían.
–Que estan saliendo.–Dijo muy tranquila,como si esto no estuviera fuera de lo común,algo que a Sanemi le intrigaba.–Ademas...te contaré.–Dijo soltando un suspiro,a lo que Sanemi no podía más,se sentia muy mal,no sabía que seria lo que Kocho le revelaría.
