Sumario: A Liam le iban las faldas… y a Niall también.
“Bite your face despite your nose, 17 and half years old. Worrying about my brother finding out, where’s the fun in doing what you’re told?”
Niall caminaba por los pasillos del instituto como lo hacía todos los días; sonriendo de lado y moviendo sus caderas provocativamente. De vez en cuando les giñaba un ojo a algunos chicos lindos que veía y a las chicas, bueno, el solo les lanzaba miradas dándoles a entender que era mejor que ellas.
La verdad es que Niall era muy “sociable”, si le queremos llamar así. A sus casi dieciocho años ya había tenido más conquistas que nadie en el mundo, él estaba acostumbrado a conseguir todo lo que quería, ¡y le iba perfecto en ello!, hasta que conoció a este chico que le ponía el mundo de cabeza y a la vez lo hacía enojar.
Su nombre era Liam Payne, atlético, buen cuerpo, tercer año de universidad, -Niall apenas iba en el primero-, y extremadamente follable… según Niall. En realidad, Payne era el sueño de todo chico, especialmente de Niall, solo que tenía un “defecto”… era heterosexual. Cuando el rubio se entero de esto soltó un bufido de decepción, a su dios griego le iban las faldas… pero luego lo pensó mejor, que le fueran las faldas no significaban que no le gustaran puestas en él.
-No lo sé, creo que es ridículo, Niall. –Le dijo su amigo George mientras se acomodaba las flores en la cabeza viéndose en el espejo del lavado. Entonces Niall pensó en quien de los dos era más ridículo.
-No le veo nada de malo. –Se encogió de hombros. –Además, no perderé gran cosa.
-Solo tu dignidad. –Niall frunció el ceño.
-Mira quién habla. –Le dijo a su amigo. –El que trae puesto un jardín en el cabello.
-¡Hey!. –Chilló el rizado indignado. –Para que sepas, a Josh le gustan. –Bufó. –Necesitas conseguirte un novio, Horan.
-De hecho. –giró los ojos. –Por eso necesito conseguir primero una linda falda.
“because they’re just girls breaking hearts. Eyes bright, uptight, just girls. But she can’t be what you need if she’s 17”
Liam entró a la gran casa donde era la fiesta y se sintió el rey del mundo. Era muy respetado por todos en la universidad, así que fuera de esta era igual. Un chico de tercer año había hecho esa fiesta y casi todos estaban allí. Había alcohol, drogas, chicas… era una combinación que Liam Payne definitivamente no se perdería.
Caminó hasta la cocina para servirse el primer trago de la noche y tocó el trasero de varias chicas en el transcurso. Sus amigos lo invitaron a que se uniera la pista y el con justo acepto la invitación. Se movía al compás de la música y de vez en cuando comentaba con su amigo Zayn sobre que chica se llevarían a la cama esa noche.
Liam sintió como se pegaron a su cuerpo y sonrió grande. Giró mareándose un poco debido al alcohol y tomó de la cintura a la chica, era rubia, Liam no podía verle la cara pero definitivamente se llevaría a la cama a una chica rubia. La apretó más a su cuerpo y la chica movió su trasero contra el miembro de Liam, haciéndolo gruñir y apretar entre sus puños la falda que llevaba puesta.
Liam no iba a perder más el tiempo en esa pista de baile, así que metió sus manos bajo la falda y comenzó a tocarle los muslos, eran suaves. Continuó su camino un poco más arriba y apretó entre sus manos el redondo trasero que poseía la rubia, provocando un gemido por parte de ella. Liam sonrió y movió su mano un poco más adelante, quitándola sorprendido al sentir algo raro “allí”. Escuchó como la chica reía y luego vio su silueta ir escaleras arriba. Frunció el ceño y se miró la mano, quizá el alcohol le había jugado una mala broma y había sentido algo raro… pero no lo creía posible, el no había bebido tanto como para perder la cordura.
Decidió dejar a un lado sus dudas y se fue a por la chica, no dejaría pasar una oportunidad como esa. Subió las escaleras y entró en la primera habitación que encontró abierta… allí estaba ella. De espaldas. Con la falda un poco arriba… ¡Mierda!, Liam podía ver su trasero a la perfección y eso lo estaba poniendo a mil.
Vio como su compañera de baile se giró y se dio cuenta de que tenía unos bonitos ojos azules, eso le encantaba a Liam. Le sonrió en forma coqueta y se acercó a él, empujándolo para que cayera sentado sobre la cama y se sentó sobre sus piernas.
-No pierdes el tiempo. –Le dijo Liam al oído mientras inhalaba un poco del olor de aquella muchacha. Ella no contestó.
Entonces Liam tomó iniciativa y la besó. ¡Joder, la beso de besar en serio!. Tenía una boca maravillosa y Liam se imaginaba en ese momento todo lo que ella podía hacer con su boca.
“Well, shouldn’t you be fucking with somebody your age instead of making changes?”
-¿Qué tal si quitamos esto, dulzura?. –sugirió coqueto y sintió como su miembro pedía a gritos salir del pantalón. Entonces escuchó como la chica se rió. Pero no reía como chica.
-Creí que solo te iban las faldas, Liam. –Dijo y el castaño abrió los ojos como platos.
No era una chica, era un chico, ¡demonios y el lo conocía!, era ese chico raro que siempre lo estaba observando en la universidad. Reaccionó e intentó empujarlo lejos de él pero Niall fue más rápido y lo acostó de lleno en la cama.
-No, no, no. –Le canturreó sobre el cuello para luego besar. Liam se estremeció. -¿Por qué tanta prisa?.
-Ba-bájate. –Le pidió Liam con voz temblorosa. La verdad, tener a su chico acosador sobre él era algo que lo ponía nervioso.
-¿Por qué?, nos la estamos pasando bien.
-Traes una falda. –Le dijo cuando cayó en cuenta. Niall elevó una ceja.
-Sí, y es linda.
-Traes una falda. –repitió y el rubio soltó una risita.
-Es porque sé que te van las faldas. –Comentó.
-Sí, pero no los chicos. –Le dijo sonriendo de medio lado, la verdad es que Niall no le caía del todo mal.
-Bueno, cambiaré eso justo ahora.
Liam estaba a punto de protestar pero sinceramente no pudo hacerlo cuando Niall ya tenía sus manos envolviendo su miembro, y menos cuando se lo metió a la boca. Cerró los ojos fuertemente y se quiso obligar a no creer en que le estaba justando que un chico se la chupara. Pero dejó de intentarlo cuando de su bocó salió un gemido tan fuerte que hasta le dolió la garganta.
-¡Oh, Rubio!. –Gimió y Niall se sacó el miembro de su poca dejando salir un “pop”.
-Niall, soy Niall. –Le sonrió. –Realmente es un gusto.
-Niall… -repitió Liam con media sonrisa y siguió mirándolo mientras el rubio seguía con su labor.
“Wrestle to the ground, god help me now”
Liam soltó un gruñido al mismo tiempo en que se venía en la boca de Niall, y sintió sentirse duro de nuevo cuando lo vio tragarse todo el líquido.
-supongo que lo has disfrutado. –Ronroneó Niall mientras gateaba sobre la cama hasta quedar de manos y rodillas sobre su futuro…¿novio?. –Y eso que no soy una chica. –Liam sonrió.
Puso su mano derecha sobre la encorvada espalda de Niall y la fue bajando hasta llegar al trasero de este. La metió bajo las bragas blancas que el rubio llevaba y pasó sus dedos por la entrada del chico. Niall gimió y restregó su rostro sobre el pecho de Liam.
-Uhhm. –Gimió y Liam sonrió con ganas para luego quitar su mano. El ojiazul lo miró a los ojos. –Que…
-me siguen yendo las faldas. –Le dijo. –Pero quizá ahora me van más cuando tú la traigas puestas.
Y bueno, esa noche Niall se fue satisfecho a su casa, y no solo porque Liam lo haya follado como tanto se lo imaginó, sino porque se sentía orgulloso de saber que podía volver “gay” a un heterosexual… ¡Y todo solo con una simple falda!.
“They’re just girls, just girls”.
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Settle down »Niam
FanfictionCada canción es una historia Niam diferente. Disfruten. THE 1975.