Rindo Haitani

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Caminabas como cualquier otro día hacia tu trabajo

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Caminabas como cualquier otro día
hacia tu trabajo

Fue un dia como cualquier otro, las personas de ahi te quedaban viendo de pies a cabezas admirando tu cuerpo bien formado, aquello te molestaba, pero por mas que los miraras mal ellos no miraban hacia otro lado

Pero hubo una mirada en particular que llamo tu atencion, era la de Rindo, el te miraba de pies a cabeza fijamente, aquello por primera vez te hizo sentir rara.
Rindo era tu jefe y te atraia de una forma inimaginable

Aunque sabias que el andaba en negocios turbios pero no le prestabas atencion, pues tu trabajabas para el y tambien estabas involucrada en eso

Te sentaste en tu puesto de trabajo y comenzaste a hacer varios papeleos

_ Te necesito en mi oficina  _ dijo Rindo en forma autoritaria para luego irse

Te levantaste de tu asiento luego de terminar lo que estabas haciendo y te dirigiste hacia su oficina

_ Pasa algo _ dijiste arrimandote a la puerta

_ Pasa y cierra la puerta _ dijo el

Obedeciste y te acercaste a su escritorio

_ No crees que esa falda es demasiado llamativa

_ ¿Que? _ volteaste a verlo seria

_ Si al igual que ese corsét, debes de estar consciente de todas las miradas que estaban sobre ti no

_ Eso no me importa siempre es asi

_ Escucha sabes que reunión de hoy es importante ven con algo decente si, no quedras que te castigue o que me enoje contigo

Lo miraste mal y te fuiste

Llego la tarde tenias que comenzar a alistarte, hiciste caso omiso a lo que Rindo te dijo, te pusiste un vestido rojo que remarcaba tus curvas y tus pechos y te pusiste un maquillaje bastante natural, tenias el cabello liso así que lo dejaste así, por último te echaste tu perfume favorito en bastantes partes de tu cuerpo, y te pudiste un labial rojo que sabía sabía fresa

Estando ahí llamaste la atención de varias personas

_ Estas hermosa _ dijo una de tus compañeras de trabajo

_ Lo mismo digo _ correspondiste

Rindo te veía a lo lejos, parecía querer destrozar cada uno de tus huesos por no haber acatado sus órdenes, sin embargo no dijo nada

Tu y el tomaban tragos, pero estaban consientes de lo que hacían

De pronto perdiste de vista a Rindo, fuiste hacia su oficina y lo viste ahí durmiendo en su silla, al parecer los tragos le habían caído mal

Te acercaste un poco a el ya que aprovechabas que estaba dormido

Susurraste cerca de el _ Y me ibas a castigar ¿no? _ diste una pequeña risa _ que mal yo que pensé que podría divertirme hoy

Scream baby ● Tokyo revengersDonde viven las historias. Descúbrelo ahora