YoonGi y JungKook llevan cinco años de un perfecto y amoroso matrimonio; pero después de un suceso que atormentó sus vidas y su relación, deciden tomarse una semana para ellos en una cabaña en el bosque.
-¿Por qué me has traído aquí?-
🌿 KookGi AU
...
Yoongi tenía sus piernas rodeando la cintura ajena, sus manos en su nuca y sus labios en los contrarios. Las manos de Jungkook lo sostenían del trasero y la tela bajo el agua acariciaba sus pieles con suavidad.
–Amor– Susurró el castaño entre besos.
Jungkook soltó un sonido para hacerle saber que lo oía y bajó sus besos al cuello ajeno, sintiendo las manos de su esposo apartar sus cabellos mojados hacia atrás.
–¿Podemos regresar?– Preguntó arqueando el cuello y soltando un suspiro. –Quiero que me hagas el amor–
Jungkook asintió sin dudarlo, saliendo del lago con Yoongi en brazos y bajándolo sobre el césped para acariciar su espalda desnuda y pegarlo más a él.
–¿Quieres que nos sequemos un poco primero?– Preguntó el azabache y su esposo asintió, mordiendo su labio inferior al separarse.
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–Me toca a mi–
Yoongi alzó la vista a su lado. Jungkook estaba sentado frente al lado a unos centímetros de él, con la mirada en una flor blanca en el agua.
–No quiero que creas que no me arrepiento de lo que hice– Dijo viendo de reojo. –Pero necesito que entiendas porqué lo hice–
– Entiendo– Asintió Yoongi en boxers a su lado.
Jungkook tragó duro. Nunca había hablado de lo ocurrido esos tres meses más que lo justo y necesario. Solo Jimin había tolerado sus crisis y las evitaba a toda costa.
–El primer mes tenía esperanzas de regresar– Comenzó fijando su vista en la flor. –Para el segundo, solo podía pensar que tardabas en contactarme por conseguir un buen abogado– Susurró mordiendo el interior de su labio. –Ese segundo mes fue el peor de mi vida–
Yoongi bajó la mirada y llevó sus dedos a su anillo de matrimonio, acariciandolo y jugando con él en silencio y dejándolo continuar.
–No me bañaba, no me afeitada, solo comía y me duchaba cuando Jimin me obligaba– Susurró. – Un día se hartó, me encontró ebrio al mediodía y me dijo que no podía seguir así– Cerró los ojos para evitar llorar al recordar lo que había sufrido esos días. –Me dijo que habías roto conmigo, que probablemente ya estuvieras con otro y que debía salir de ahí antes de que me destroces–
