Me desperté por los rayos de luz que impactaban en mi cara, hoy no había clases ya que hoy era el día de la purga, y había alumnos que se y van del país o de viaje para no estar en está fecha
Salí temprano de mi casa para ir a comprar unas cosas, tenía que comprar madera para tapar las ventanas y tal vez un cuchillo, tenía que llegar rápido antes de que se acabará
Llegue al supermercado, busque la sección de madera, compré la madera que necesitaría y salí en busca donde hubiera una tienda que vendieran armas, cuando estuve por entrar vi a raúl atrá vez del vidrio, estaba junto a sus amigos estaban viendo armas "a lo mejor ellos van a purgar" pensé
Tan solo pensar que raúl purgaria me ponía los pelos de punta, entre rápido ignorando el hecho que el estuviera ahí, y fui a la sección de martillos ya que necesitaría uno y de paso compraba un cuchillo
Solo pedía de que raúl no me viera, agarre un martillo no tan caro, un cuchillo barato pero que por lo menos estuviera filoso y así defenderme si llega entrar alguien y me llegará hacer algo
Me forme para que me cobraran y en vez en cuando buscaba con la mirada a raúl para evitar que me viera, me estaba desesperando por qué la fila y va muy lento, y tenía que poner todavía las tablas en las ventanas y no se cuánto tiempo me llevaría hacer eso, mientas maldecía en mi mente escuché como en la calle empezaban a gritar, gire mi cabeza y vi que había demasiadas personas con mascaras y con ellas las acompañaban sus armas, supongo que esas personas está noche y van a purgar o solo querían asustar ahorita que todos estaban paranoicos, pagué rápido los dos objetos y me salí, me puse mi capucha y camine rápido, quería evitar hacer tener algún tipo de contacto con ellos ya que algunos estaban ahí para cazar, ya casi salía de toda esa multitud de personas hasta que siento como alguien me agarra del brazo
–Hola guapo, ¿Cuánto cobras? -dije un chico borracho, ya que este olía a cerveza y no estaba en sus cincos sentidos-
–¿Qué?, Cómo que cuánto cobro -dije frunciendo el ceño, esté que se pensaba que era una maldita zorra-
–Tu ya sabes de qué hablo, cuanto cobras para que me hagas una mamada
–Estás loco, ya déjame -puse mi mano en su agarre y traté de safarme, pero no podía, el era mucho más fuerte que yo-
–Te dijo que lo sueltes, no escuchastes pedazo de mierda -volteo haber a la persona que había dicho eso, y veo que era raúl-
–Qué te pasa maldito
–Vete, o si no quieres que ahorita saque mi pistola y te mate -dijo poniendo una mano en el agarre y otro en la pistola que tenía escondida en su pantalón, a ésto el borracho se acojona y se fue sin más-
–Mu... muchas gracias raúl -dijo borja con su corazón latiendo a mil, tremenda asustada que se llevó-
–No hay de que hombre -a esto raúl todavía no había soltado a borja-
–Ya... ya me tengo que ir, adiós -me safe de su agarre y no le di ni tiempo para que hablara, ni lo mire, solo quería llegar a mi casa poner la madera y dormir hasta que llegara el día siguiente y estar luego de chismoso ver a quienes habían matado
[...]
Luzu ya estaba hasta los huevos, todavía le faltaba unas maderas por poner, eran las 7 de la tarde, todavía faltaban 5 horas para que empezará la purga, se decidió dar un descanso, entró a la cocina y abrió la nevera viendo que tenía para comer, vio que tenía una miseria y mejor salió a comprar, solo rezaba que no hubiera tanta gente, fue hacía un supermercado y estaba lleno, fue a otro y estába igual de lleno, pero encontro una tienda que no había tanta gente, se llevó 3 refrescos y algunas bolsas de papas,varios dulces y varias sopas instantaneas para poder comer en la noche, pagó por todo y esté se dirigía hacía su casa pero sintió que lo estaban siguiendo, borja al sentir ésto repartidas ocaciones volteaba hacia atrás haber si acachaba al individuo, pero no vió a nadie, pensó que estaba paranoico ya que en menos de 5 horas y va a empezar la purga, así que supuso que todo era obra de su imaginación, oh luzu que equivocado estabas.
