★capitulo 05★

0 0 0
                                    

-Daysi: ¡Kuroii-chan! —Exclamó.—

-Kuroii: Daysi...

-Daysi: ¿Te despertaste antes de tiempo?

-Kuroii: Sí, mi gato me estaba lamiendo la pierna.

-Daysi: ¡No sabía que tenías un gato!, ¿Cómo se llama?

-Kuroii: Black.

-Daysi: Que nombre tan lindo...

-Kuroii: Sí, es un gato negro con ojos verdes...

-¿?: ¿Qué mierda es esto?—Suspiró otra chica rubia.—

-Jennie: Simple. A nosotras también nos cuentan pesadillas.—Dijo la desaparecida.— Yo soy Jennie, ella Donyoku, Daysi, y Kuroii...

-Neiru: ¿Quien eres?

-Jennie: ¿Ah?, Ya entiendo. Tu estabas en mi lugar, ¿cierto? Ayer cuando no las visité en sus sueños....

-Daysi: ¿Cómo te llamas?

-Hookori: Hookori. —Respondió con total frialdad.—

-Daysi: ¿Hookori qué? —Tenía curiosidad acerca de su apellido.—

-Hookori: Nada. Simplemte Hookori y ya.

-Daysi: pero...

-Hookori: Hookori y ya. —Volteó a otra parte con la intención de ocultar su rostro enojado.—

-Daysi: ...De acuerdo.

-[. . .]

-Donyoku: ¿¡Qué es este lugar!? —Se incomodó por todos los ojos que la perturbaban.—

-Neiru: Me asustaste...—Señaló medio dormida.—

-Hookori: Aquí vivía antes. Comparado con Tokyo es una perdición.

-Daysi: ¿Por qué dices eso?, ¡Estoy segura de que sin todos esos ojos sería una bonita ciudad!

-Hookori: Eso es porque no haz vivido aquí.

-Kuroii: Déjala, Daysi. —Su mano se recostó en el hombro de la pelirroja.— No sabes sobre ella.

-Daysi: Pero tu tampoco...—Le advirtió a través de una indirecta, no sabían con quién estaban en ese momento.—

-Donyoku: V-Vamonos...

-Jennie: ¿Porqué tan nerviosa, Kim? —Se acercó a esta con las manos detrás.—

-Kuroii: Déjala. —Alzó la voz.—

-Jennie la observó sin decir nada antes de alejarse de la hipócrita chica.

-Kuroii: Daysi, Neiru y Donyoku se quedarán conmigo. Allá ustedes.

-Hookori: ¿ Y a esta que le pasa? —La observó de pies a cabeza con desprecio. Analizando cada prenda o accesorio de ella.—

-Jennie: Ah, cariño, ella es así. Vámonos yá, no tenemos nada que hacer con ellas. —Enredó su brazo con el de la rubia y se la llevó a otro lado de la calle.—

-Donyoku: ¿Por qué es así?... No recuerdo haberle hecho algo...

-Kuroii: Lo sé, Kim. Este tipo de personas se creen que terrón de azúcar en un contenedor de sal. Su superioridad falsa las ciega.

-Donyoku: Pero...

-Kuroii: Y no. No te acosa por algo que le hayas hecho.

-Donyoku: ¿ Y entonces por qué lo hace?

-Kuroii: Porque está tan rota por dentro que desea repararse con pedacitos de los demás; Para sentirse completa estando incompleta.

-Un silencio incómodo cayó sobre ellas. Los ojos de los edificios las veían con ojos atentos, como espectadores.

🌙𝐍𝐈𝐆𝐇𝐓𝐂𝐑𝐀𝐖𝐋𝐄𝐑Donde viven las historias. Descúbrelo ahora