Pelea Fuerte, Ama Dulce. ‹‹LAWRUSSO››

CAP 25🥀

Daniel abrió por completo sus ojos, cerrándolos casi al instante por la luz que calaba en su vista. Estaba confundido, lo último que recordaba era haber tomado la pastilla y... A Mike dando la orden a los cobras, "¡ese desgraciado!", pensó Daniel.

-¿LaRusso?.- no podía escuchar con claridad la voz de su acompañante, pero suponía que se trataba de ese bastardo.

- No sabes cuánto te odio.

Johnny se quedó perplejo observando a Daniel, esas palabras le cayeron como balde de agua fría, haciéndolo temblar un poco.

- ¿Daniel estás bien?.- Preguntaba Susan un poco asustada mientras Tommy se le acercaba intentando tocar su hombro.

La vista de Daniel apenas podía enfocar los rostros de las dos personas frente a el, hasta que por fin pudo visualizarlos sabía que se trataba de Tommy y Susan.

- Chicos... ¿Qué paso? ¿Y Johnny?.- Pregunto el castaño desesperado buscando al rubio con la mirada, encontrandolo al instante, suspiro aliviado tocándose su pecho.

- ¿Te sientes bien ahora Daniel?.- Tommy tocaba su frente para descartar alguna fiebre.

- Me siento bien, solo estoy confundido, lo último que recuerdo es...

- Chicos, discúlpenme ahora por lo que les voy a pedir, pero necesito hablar seriamente con LaRusso, les agradezco demasiado todo, no habría podido ayudar en esto de no ser por ustedes.- Soltó Johnny un poco apenado, pero firme en su petición.

- Pero...- Susan fue detenida en su oración por Tommy, que la veía con mirada cómplice para dejar a solas a los chicos, Susan supuso que Tommy ya sabía de qué se trataba. La castaña asintió sonriendo a Johnny y Daniel, mientras movía su mano de un lado a otro despidiéndose.

- Cuidense, tomen las cosas con calma chicos.- Tommy les dió una pequeña sonrisa despidiéndose tomando la mano de Susan para salir de casa de Johnny.

Una vez que los chicos se fueron, Johnny tragó saliva un poco asustado, la situación en la que estaba ahora le angustiaba mucho.

- ¿Johnny?.- Daniel miraba confundido al rubio que se mantenía dándole la espalda. Johnny volteo poco a poco mirando al castaño sintiéndose culpable.

- Dani... LaRusso disculpame.- Dijo Johnny mientras se tiró abrazando al chico que se encontraba estaba confundido no sabía que rayos estaba pasando, tampoco el porque el rubio se disculpaba, el castaño comenzó a acariciar el pelo de este.

- Tranquilo Johnny, no te disculpes por nada.- Daniel depósito en pequeño beso en la frente del rubio.- Aunque... ¿Por qué te estás disculpando?

Johnny suspiro un poco antes de hablar.- Dude de ti por un momento, mi temor de perderte me cegó. Fui un idiota.- Dijo Johnny tomando la mano de Daniel para apoyarla sobre su mejilla, empapando la un poco con sus lágrimas.- No mereces algo así, si quieres que esto termine aquí lo entenderé.- Johnny miro a Daniel a los ojos mostrándole una sonrisa afligida, pero sincera.

- ¿Por qué terminaría las cosas contigo después de todo lo que ha pasado? Nunca te dejaría Johnny, a menos que tú lo quisieras. Eres por lo que he estado luchando contra mi mismo y ese bastardo. ¿Qué carajos sucedió?

- El chico rubio que está con los cobra te drogo o no se si fueron esos imbéciles, pero uno de ellos lo hizo. ¿Quién es el LaRusso? El chico rubio.- Hubo un silencio que para ambos se sintió eterno, la tensión consumía a Daniel pero sabía que era momento de hablar.

- Barnes... Mike Barnes.- Johnny miro estupefacto a Daniel, se culpo a sí mismo por haber sido tan ciego y no haber asumido que ese tipo era el mismo de las pesadillas de Daniel.- ¿Estás listo para escuchar mi historia de principio a fin? Con la condición que me cuentes la tuya.- Johnny acepto sin pensarlo dos veces, comenzó a escuchar la historia de Daniel y lo único que hacía era empeorar con cada anécdota contada. Era horrible imaginar a Daniel en situaciones así, siendo golpeado y abusado, un inminente odio comenzó a crecer en su pecho.

- Ese maldito hijo de perra, lo voy a golpear tan fuerte que escribirá "lo siento" con su sangre.- Johnny apretaba sus puños intentando ocultar el coraje que estaba sintiendo.

- Tengo miedo de él, siempre he sido un cobarde, casi pongo en riesgo nuestra relación por ese imbécil que no debería influir ni un poco en mi vida.

- Hey cálmate, eres la persona más fuerte y valiente que he conocido ¿Ok?. Todo estará bien Daniel, prometo que estaré contigo siempre.- Johnny beso la frente del castaño haciéndolo sonrojar, sin duda el que lo llamara Daniel era nuevo, y no le desagradaba en lo absoluto.

Daniel beso a Johnny en los labios ante la emoción sorprendiendo a su contrario por el repentino beso.

El rubio continúo el beso, mientras acariciaba el pelo del castaño, Daniel acariciaba las mejillas de Johnny acercándolo más a el.

- ¿Estás bien con esto LaRusso?

- Dime Daniel.- Johnny ladeó su sonrisa besando al chico frente a él.

Juntaron sus frentes, rozando de manera delicada sus narices mientras sonreían. Johnny se retiró lentamente depositando besos en las mejillas del castaño, hasta llegar a sus labios besándolo de la manera más delicada posible, como si fuera un objeto tan frágil que ante el mínimo toque brusco se fuera a romper. El estómago de Daniel comenzó a sentir esas dichosas mariposas, lo cual lo hizo reprimir una sonrisa, fallando en el intento.

- En verdad discúlpame Daniel.- El hecho de que Johnny lo llamara Daniel hacia que lo recorriera una corriente eléctrica, no sabía si eso era bueno o malo, pero no le desagraba, de hecho le gustaba y mucho.

- Si vuelves a disculparte venderé los cassettes del walkman.- Dijo Daniel sonriendo de soslayo, lo cual intimidó un poco a Johnny.

- Buena jugada Dani.- Johnny se acercó denuevo a besar sus mejillas, para ahora llegar hasta su cuello, pero se detuvo al instante, no quería presionar a Daniel después de todo lo que había sucedido.

- ¿Por qué te detienes?.- Dijo Daniel mirándolo con un leve puchero. "¡Tan tierno!", pensaba Johnny.

- No se si sea correcto, después de todo lo que ha sucedido. Apenas hace media hora despertabas de haber sido drogado. Esto está mal, yo... Perdón.- Johnny se levantó rápidamente, pero sintió un agarre en su muñeca que lo impedía separarse.

- Si yo lo deseo, entonces es correcto, adelante, contigo se que todo está bien Lawrence.- Johnny sintió un pequeño nudo en la garganta al ver la confianza que emanaba Daniel hacia a el, quizá nunca se perdonaría haber dudado de él, aunque sea por un segundo. Alejo los malos pensamientos y se concentro en ver al chico frente a él, la mejor vista que podía tener siempre era observando a Daniel.

Johnny se recostó alado del chico observando cada detalle, mientras lo abrazaba.

- Eres muy lindo Daniel.- Johnny beso su frente y se dispuso a dormir. El castaño solo podía sentirse avergonzando por excitarse al escuchar a Johnny llamándolo por su nombre. "Que día más de mierda", pensaba.

Despejó un poco esa momentánea sensación y solo pudo pensar en lo reconfortante que era abrazar a Johnny mientras esté dormía plácidamente y ver la confianza con la que lo hacía, sin duda era la mejor sensación de la vida, quizá incluso mejor que el sexo, el sentir que la persona que amas se siente a salvo con tu presencia a tal punto de dejarse indefenso ante ti, es una experiencia única en la vida.

Lo mejor era disfrutar por ahora, porque los problemas solo incrementaban.