No digas nada, no viste nada.-Maitake

Un corazón acelerado por una sonrisa sin arrepentimientos.

Advertencias:
⚠️ Algunos sucesos se alterarán a conveniencia de la historia.
⚠️Si no haz leído el manga probablemente encontrarás spoilers.
⚠️En este perfil no se odia a Tachibana pero si a Kisaki, gracias.

Takemichi no es como si no estuviera consciente de que la muerte para todos eventualmente llegaría, sin embargo el que aquel día se encontrara dentro de una pequeña capilla viendo a familiares y amigos de la familia de Tachibana llorando por la pérdida de ella, era algo que jamás pensó presenciar en esta vida.

Tenía miedo de acercarse a donde yacía el cuerpo sin vida de Tachibana ya que, ingenuamente pensaba que mientras no lo hiciera, ella seguiría a su lado y así ambos pudiendo continuar con su vida, por supuesto que sabía que era imposible, pero se negaba a aceptarlo.

Por otro lado, la inquietante sensación de que algo no estaba bien con respecto al misterioso accidente que provocó su muerte, le impedía poder bajar la guardia; Y aun a pesar de su inquietud, una cálida mano se terminó posando sobre su cabeza, provocando así que se sintiera seguro y si dio una caricia o no, no lo sabía, ya que quizá solo se estaba imaginando cosas.

A su lado se encontraba un chico no mucho más alto que él, quien a su vez se mantenía sereno, Takemichi sintió su corazón acelerarse mientras veía a Mikey acercarse a Tachibana Hinata y así poder mostrar sus respetos ante ella.

A pesar de sus recientes descubrimientos que envolvían a un misterioso Sano Manjiro y cosas del pasado, había  decido olvidarlo, al menos por ahora, pero si era sincero consigo mismo, inconscientemente tomó distancia desde ese día y que ahora, le mostrara su apoyo manteniéndose a su lado, le hizo querer llorar.

—Gracias. —Takemichi se atrevió a hablar una vez que estuvieron fuera de aquel lugar, ya que de otra forma se hubiera sentido irrespetuoso.

—¿Mmm? —Supuso que, para alguien como Manjiro, el estar para sus amigos y que estuvieran a salvo era algo como respirar para él.

—Por venir, realmente lo aprecio —Hanagaki entendía que no había palabras suficientes como para agradecer lo suficiente el que Mikey estuviera a su lado aquel día.

—Debes saber, que haría cualquier cosa por y para ti Takemitchy, lo entiendes ¿verdad? —No lo entendía, no realmente; Pero aquello lo hizo darse cuenta que de nuevo ahí estaba, el Mikey que una vez conoció antes de recordar todo. Terminó asintiendo mientras era llevado por el rubio lejos de ahí. 

Se regañó internamente por desconfiar de Mikey y pensar que llegaría a ser una mala persona ¡Que tontería!  Eso era (podría) ser imposible. Sintiéndose con una confianza que no poseía y estaba seguro que jamás la tendría, decidió apretar un poco más sus brazos alrededor de Mikey mientras viajaban en la  CB205T en aquel atardecer.

—No sé si debería decirlo o no pero creo que mereces saberlo —Sano Manjiro decidió reducir la velocidad para que sus palabras fueran escuchadas—. Estuve investigando un poco del día del accidente de Tachibana Hinata, la policía encontró al culpable.

—¿Culpable? En los reportes dijeron que fue un accidente, entonces ¿Qué pasó? ¿Quién fue el culpable? —Quien fuera el bastardo que provocó el accidente recordaría su nombre y pediría si es que existían los Dioses que lo hicieran pagar una y otra vez por lo que hizo.

—Kisaki, Kisaki Tetta —Vagamente en sus recuerdos aquel nombre se le hacía familiar, pero no podía decir el por qué. Mikey continuo—. Como mínimo estará encerrado hasta que sea mayor de edad, aun así, puedes confiar en que estaré ahí para protegerte, Takemitchy —Y tras decir esto, Mikey le sonrió y el corazón de Takemichi se aceleró.