Jeongin despertó, malhumorado por los fuertes murmullos. se intentó girar hacía ambos lados, sin embargo en ninguno de ellos sintió la calidez de sus pololos, puchereo entre sueños.
A duras penas se pudo acomodar en el respaldo de su cama, intentando enfocar la vista en los dos uniformados frente a el.
— Jeongin, ¿despertaste, wawa? - exclamó uno de los altos hombres, Seungmin se acerco, acariciandole con ternura la carita adormilada. — hoy no vai a ir al colegio, duermete un ratito más.
— ¿no voy a ir? - preguntó frunciendo el ceño, ahora más despierto. — ¿po qué? - puchereo.
— hay manifestacion hoy día, dicen que va a estar muy peligroso. - habló ahora el rubio, Hyunjin, terminando de ponerse su uniforme color verde. — no vamos a dejar que vayas al colegio a arriesgarte, menos si vai a volverte en metro.
— así que duerme nomas, nosotros ya tenemos que irnos. - murmuro Kim, acercándose a plantar un besito en la comisura de los labios del niño con cabellos rojos.
— pe-pero.. si va a estar brigida la manifestación, ¿po qué van? - puchero, levantándose rápidamente para detener a ambos chicos, aferrándose a sus manos.
— es nuestro deber, bebé. - murmuro Hyunjin, depositando un casto beso en los labios del menor.
Ambos mayores se fueron, Jeongin volvió a la cama sin dejar de pucherear.
Hyunjin, Seungmin y Jeongin se conocían prácticamente desde su nacimiento, sus madres eran mejores amigas, por ende, crecieron juntos, Hyunjin y Seungmin se llevaban un par de meses, tres, para ser exactos.. y bueno ambos con Jeongin se llevaban al rededor de cinco años, Yang, actualmente está cursando su último año de liceo, y los mayores habían optado por entrar al cuerpo de carabineros de chile. ¿Cómo se habían vuelto una pareja de tres?, eso ya era otra historia.
Los tres desde siempre se tuvieron un cariño algo extraño, desde pequeño se daban besitos a escondidas y se tocaban en zonas que no debían ser tocadas por nadie más, gracias a Dios, nadie nunca se dió cuenta de ello, hubiera sido muy vergonzoso. A medida que crecían, ese afecto se fue convirtiendo en un enamoramiento que ya no estaban a tiempo de frenar, es decir, estaba ahí desde qué tenían diez y cinco años, detenerlo ahora, ya no era una opción.
Los mayores entraron a un régimen de internado a penas salieron de cuarto medio, y el pequeño Jeongin acababa de cumplir doce años. Fue una larga espera de cuatro años exactos sin poder verlos, fue terrible, sobretodo para Yang, a quién no le permitieron nisiquiera darles una visita a quiénes fueron en algún momento sus mejores amigos.
Pero el reencuentro, fue maravilloso.
Cuándo los mayores vieron a Jeongin, no podían creer que ese era el mismo niño de doce años que habían dejado ahí la última vez que lo vieron, ahora con dieciséis años, más alto, con su cabello tintado de rojo fuego, sus piernas largas y delgadas, perfecto.
Y ellos claro que no se quedaban atrás, mucho más altos, con una masa muscular impresionante gracias a las largas horas de ejercicios con las que debían cumplir en el régimen, más formados, con sus rostros más definidos.
Al año siguiente, empezaron a pololear, en secreto de todos, claro. Seungmin y Hyunjin vivían juntos en un bonito apartamento, Jeongin seguía viviendo bajo el techo de sus padres, aún que pasaba más tiempo en el departamento de sus "mejores amigos", que en su propia casa.
Y así estaban ahora, en una relación prácticamente prohibida, amándose y respetándose a su propia manera.
( 🪴 )
Jeongin bufó, sabía que lo que estaba haciendo estaba terriblemente mal, pero no podía quedarse todo el día encerrado en el departamento por miedo a un par de personas.
Felix lo había llamado hace un rato, emocionado por el nuevo lanzamiento de una figurita de lol que ambos morian por tener.
El menor ya había llegado al centro de la ciudad, buscaba por todos lados a su mejor amigo extranjero, se suponía que se verían justo en ese paradero, pero no estaba y por más que lo llamaba y enviaba mensajes, esté no respondía.
Nisiquiera pudo reaccionar cuándo una turba de gente empezó a caminar, alzando banderas y carteles mientras recitaban un cántico nada family friendly, las personas empezaban a romper todo lo que podían, las vidrieras, los autos y hasta empezaron a quemar un par de pastizales, Jeongin tenía miedo, mucho miedo. Se calmó un poco en cuánto vió a los carabineros llegar corriendo, ellos harían algo, ¿verdad?
Empezaron a tirar lacrimógenas a lo loco, intentando que todas las personas se dispersaron del lugar, a Jeongin le llegó una lacrimógena, sus ojos empezaron a lagrimear, su respiración a cortarse, el no estaba haciendo nada, ¿alguien podría ayudarlo?, lo único que hicieron fue agarrarlo, lo tomaron a la fuerza, pasaron un par de esposas por sus manos, su respiración seguía fallando, se cortaba y dejaba de funcionar.
Es que en lo que nadie había puesto atención era que..
¡Jeongin es asmático!
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señores carabinerosⴰ༢ ( hyunminin, 🇨🇱. )
Fanfiction♡‧₊˚hyunminin : Seungmin y Hyunjin son carabineros, Jeongin es su pequeño novio rebelde. ( #chile, #ficción, #soft & #trío. )