señores carabinerosⴰ༢ ( hyunminin, 🇨🇱. )

Viernes

🔞‼️

Cómo cada viernes, Jeongin llegó a la casa de sus pololos después de su larga jornada de liceo, entró y cómo esperaba, no había nadie.

Debían seguir trabajando, así que cómo si el depa fuera propio, pasó cómo pedro por su casa directo a la cocina para cachar que había de comer.

Ñam fideitos.

Se sirvió un platito y lo metió al micro mientras dejaba su mochila y poleron encima del sofa.

Cuándo ya se había sentado a comer, le llegó un mensaje del grupo que tenía con sus pololos preguntando si ya estaba en la casa, así que le mando una fotito de sus fideos para confirmar su llegada.

Recibió corazoncitos por respuesta.

Una vez el plato quedó vacío lo lavo y dejó donde correspondía para después saltar a la cama gigante de sus pololos y quedarse ahí con el celu un ratito.

Cambió de posiciones varías veces mientras veía tiktok, aúnque el pequeñito no contaba con el roce de la almohada en su entrepierna.

Fue algo inconsciente que su cuerpo estaba haciendo por el, frotándose contra aquella esponjosa almohada.
Pequeños jadeos escapaban de su boquita mientras aumentaba la velocidad con su pelvis.

Tan perdido en el inminente placer, que sus oídos no fueron capaces de captar la puerta de la entrada siendo abierta.

Hyunjin y Seungmin pasaron a la casa dejando sus bolsos junto a la mochila del menor.

— ¿Nini? - preguntó Seung al aire, esperando respuesta de dónde se encontraba.

— Yo cacho que se durmió. - opinó el rubio, ambos asintieron estando de acuerdo, caminando hacía la pieza para comprobar la teoría.

Y vaya sorpesa.

— ¿Jeongin? - llamó Hyunjin boquiabierto por tal sorpresa que el menor les había dado. — Amor..

El pequeño se alertó, dejando su celular a un costado sin poder detener los movimientos de su cuerpo.

— Jinnie... Minnie.. - jadeó el menor, los carabineros no tardaron en acercarse.

— Estabai caliente parece, weoncito. - se burló Hyunjin empezando a besar su cuellito.

— Tra-Trátame bonito.. - murmuró el menor apenado. — estoy sensible..

— Ya mi bonito. - Hyunjin subió sus besitos a los labios del menor, dejando suaves piquitos.

El rubio con cuidado cargo al menor y lo dejo sobre una de sus rodillas, empezando a hacer que se frotara contra su pierna frenéticamente.

— Jinnie no.. no-no.. no te has cambiado e-el uniforme... te va-vas a ensuciar.. - se alarmo el menor.

— No importa wawa.. mañana no trabajamos.. - murmuró en su oído, calmando los pensamientos ajenos.

Hyunjin disfrutaba de los hermosos sonidos que la boquita del menor dejaba escapar mientras se frotaba, se saco su gorro del uniforme y se lo puso antes de atacar sus labios con lujuria.

— Que se ven calientes, weon. - habló Seungmin, frotando el con su propia mano por encima del pantalón.

— Todavía tengo una pierna desocupada.. - llamó el mayor y Kim no dudo en acercarse.

Una vez arriba, los tres empezaron a emitir sonidos de placer, el más perdido entre ellos era definitivamente Jeongin, completamente ajeno a lo que lo rodeaba, cegado por el momento.

El castaño se acerco al menor, depositando un beso que fue rápidamente correspondido.

Tan perdido y tan excitado, que se corrió sobre la pierna de Hyunjin.

— A-Ah...- los espasmos lo hacían saltar delicadamente sobre aquella pierna.

Hwang lo agarró por la cintura para frotarlo un poco más fuerte y así poder lograr que los espasmos se volvieran más intensos.

— ¿Mi bebito ya acabó? - se burló Seungmin, acariciandole la cabecita que ya estaba recostada sobre el pecho de Hyun.

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Ya bañados y con ropa limpia, los tres estaban en el sofá mientras veían los simpsons y comían papitas.

— Principito. - llamó Hyunjin al menor, Jeongin lo miró. — ¿en que estabas cuándo llegamos?..

— Oye si, cabro chico, ¿que estabai haciendo para ponerte así de caliente?

— Nada.. - dijo sincero. — es que justo.. me puse así.. y.. ya que me da vergüenza.. - se tapo la cara con el cojín. — no molesten..

— Ay innie.. eres el niño más lindo del planeta tierra.. - murmuró Seungmin, abrazándolo suavecito.

— ¿Los aliens son más lindos que yo? - preguntó ofendido.

— El niño más hermoso de toda la galaxia. - corrigió Hyunjin, dándole piquitos tiernos.

— Me encantan los viernes.. - confeso el menor. — me encanta estar así con ustedes..