¿Me permites probar tus labios una vez más?

198 25 2
                                    

     La suave música de fondo, la poca iluminación que se colaba por las farolas de la calle por las ventanas, el firme agarre a su cuerpo, las risas tiernas que soltaban en sus inexpertos pasos de vals, pero sobre todo, la mágica compañía del ser amado. JungKook dudaba de que existiera un momento más romántico en lo que llevaba de vida. Su corazón no dejaba de latir emocionado por las miradas que le dedicaba YuGyeom mientras danzaban entre los sillones de la sala siguiendo el ritmo lento y romántico que marcaba la melodía en sus acordes.

Dieron una vuelta en su propio lugar logrando hacerla en un elegante y perfecto intento, finalmente, siendo sólo la primera de varias que darían alrededor del sofá rojo.

Cuando YuGyeom soltó su mano, JungKook se estiró separándose algunos pasos, subiéndose incluso a la mesa del centro, sin esperar que el menor aprovechara para tomarle de la cadera y levantarlo, el otro apoyándose al agarrarse de los hombros de su pareja. Se vieron el uno al otro, sonriendo porque no eran profesionales en absoluto y ambos agarres temblaban, YuGyeom le bajó delicadamente antes de ceder completamente y aprovechó para mantenerle aún más cerca, uno frente a al otro.

—Te amo.

Se lo había demostrado un par de veces de otras maneras, con dulces actos y miradas largas, pero por primera vez pudo decirlo porque JungKook se había prometido no decirlo hasta no estar seguro de que estarían juntos para siempre.

Y YuGyeom no pudo ocultar la felicidad de su rostro al escucharle decir eso —Yo más, no tienes idea Jeon JungKook.

Besó esos tiernos labios con una ternura similar a la que usaban sus manos rodeando la cintura ajena y dejando caricias bajo la ropa en su espalda. El beso sabía a pastel de zanahoria que habían comido como postre esa noche, con algo de sudor por el esfuerzo que hicieron en la persecución y en su danza.

Misma que continúa luego de terminar ese beso. Ahora JungKook lideró llevando a YuGyeom hacia la ventana para pasar frente a ella, pero a medio camino el mayor trastrabilló por un firme agarre a su tobillo, el anillo lastimó su piel expuesta por usar shorts.

Voltearon para encontrarse al hombre ensangrentado y herido que sostenía el tobillo de JungKook con fuerza, pero no demasiada, fue sencillo para el otro joven quitar los dedos —Muérete ya. —gruñó JungKook enfadado con su padre, como este parecía todavía ser capaz de arrastrarse el joven fue enojado hasta el sillón manchado con sangre y tomó el cuchillo, volviendo en sus pasos para clavarlo con ambas manos varias veces en la espalda de su padre, sumando más puñaladas a su cuerpo de las que ya tenía.

Detrás de él, YuGyeom no intervino, sólo espero y dio un vistazo a la casa que se quedaría completamente vacía. Con el padre de JungKook muerto, nadie les impediría estar juntos nunca jamás, no volvería a ir a buscarlo a su casa para exigirle que fueran a casa, no se lo llevaría a otro país como tenía planeado el adulto mayor.

El sonido del cuchillo caer contra el suelo advirtió que JungKook había terminado lo que los dos empezaron.

» Ya está... ya está —temblaba completamente, pero se relajó cuando YuGyeom entrelazó sus manos. Las maletas estaban escondidas debajo de la cama del mayor, podían irse cuando lo desearan—. Vámonos YuGyeom.

—Sí hyung —pero antes—, sólo bailemos una canción más.

Sangre había salpicado el rostro de JungKook. Con cuidado y suavidad la limpió mientras el mayor suspiraba, procediendo a lamer unas manchas de esa sangre en sus labios. El sabor fue fuerte, poco agradable, pero igual quiso compartirlo con su amado al besarle, rodeando su cuello con ambos brazos mientras permitía que este le tomara de la cadera liberando la canción que recién comenzaba a reproducirse. 

ONE MORE SONGDonde viven las historias. Descúbrelo ahora