Recuerdos

5 1 0
                                    


•Josh•

Hoy es uno de esos días en los que te gana la nostalgia, las ganas de que el pasado vuelva pero el pasado por más hermoso que sea no se puede repetir.

Selena había sido desde siempre el único rayo de Sol que he tenido en mi vida, desde que la vi supe que estar cerca de ella me traería paz, pero no queria que se acercará yo sabia que todo lo que tenía que ver conmigo se dañaba y no poder tenerla me hacia odiarla, algo tonto no?.

Yo enserio quise mantenerme lejos de ella pero me fue inevitable no acercarme, ella era como un imán que me jalaba aunque pusiera todas mis fuerzas para no acercarme.

¿Que si la extrañaba? Muchísimo pero era mejor estar asi, era por su bien y yo lo amaba mas que a mi, por lo tanto que ella estuviera bien es mi prioridad aunque no fuera conmigo queria que fuera feliz. Ella fue la única que me vio y me rescató del hoyo donde estaba y no puedo hacerla caer cuando ella fue la que me levantó.

𝑯𝒂𝒄𝒆 𝒖𝒏 𝒂𝒏̃𝒐

Llevo tocando como 3 veces y nadie abre la puerta estoy a nada de irme.
Selena y yo llevábamos hablando y viéndonos días y la verdad es que tratar con la chica que me ha enamorado desde el primer día que la vi es maravilloso, Ash ya me escucho cursi.
Estoy a nada de irme pero entonces Selena abre, parece que recién se levanta, está con el pelo hecho un desastre, la cara adormilada y las cejas arrugadas de confusión, incluso así se ve demasiado hermosa. La miró con una ceja alzada y ella me tuerce los ojos

- Hola que te paso? Un huracán vino por ti?- le sonrió con sarcasmo, ella me hace una seña para que siga, le doy un beso en la mejilla y cierra la puerta cuando entro.

- Hola que haces aquí?- me dice antes de dar un bostezo, cabe aclarar que son las 4 de la tarde se me hace raro que este durmiendo a esta hora

-Pues vine a verte- Selena me miró con las cejas arrugadas aún

-Si pero por que? Estás bien?-

-Si, solo quería verte- ella me sonrió y me hizo seña para sentarme

-Que bueno que viniste por que no quería pasar la tarde sola- La mire con cara de "es enserio?"

-Estabas dormida- Le recordé ella se rió como si fuera la más inocente

- Si pero por que en mi sueño no estaba sola- me dijo ella jugando, decidí seguirle el juego

-¿Y que hacías en tu sueño? ¿O más bien con quién?- ella me sonrió pícara y me dijo

-Con un Dios griego por ahí ¿por qué?- la mire serio y ella se rió dándome un beso en la mejilla - ¿Celoso Potter?- le vire los ojos

- No solo que tus sueños son raros- ella solo sonrió negando con la cabeza

-Puedes estar tranquilo soñé que estaba saltando en una nube- no pude evitarlo solté una fuerte carcajada, es que amaba hablar con ella, siempre me hacía sonreír de alguna u otra forma.

- ¿Cuantos años tienes? ¿5?- le dije aun riendo

-No, tengo 10 pero gracias por preguntar- la quedé mirando, sus facciones eran hermosas, ella era hermosa.

Tenía los ojos azules, unos labios carnosos, tenía una sonrisa que iluminaba mis noches tristes y alegraba mis días, es que con ella todo era mas que físico, ella era increíble, tan carismática, bondadosa, sarcástica, divertida, inteligente, podría pasarme toda una vida describiendo lo maravillosa que era.

-Vemos una película?- me preguntó ella sonriendo a lo que asentí

- Okey pero una de acción- ella arrugó la nariz en señal de negación

Amores que duelenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora