✿ Ateez Imaginas, Pov's y Reacciones ✿

✿ Red Wedding 2/2 ✿

Segunda parte. Fuerza hermanxs.

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Mingi

Entendiste desde el inicio de su relación, que estarías rodeada de algunos inconformes, algunas fans se oponían al hecho de verle casado, pero aún así, pusiste tu confianza ingenuamente en el amor y la felicidad juntas. ¿Fue ese el error?
Una cosa era segura, hubieras preferido un mil veces que ese día no pasara o que se cumpliera con el objetivo real.
Fue ahí, en la salida del hotel dónde se organizó la boda, minutos después que terminara, ambos y unos de sus amigos estaban verificando que todo estuviera en el auto, luego se cambiarían para ir al aeropuerto... pero... Alguien, muy valiente o con la mente retorcida les observaba, esas sonrisas y felicidad le calentaron la sangre y sin presentir que mingi te abrazaría de repente apretó el gatillo.
Algunos los miraron a ustedes, otros a su alrededor y algunos cercanos dejaron de comentar y sonreir para alarmarse cuando él cayó al suelo, no le pudiste detener y ahí, con tu vestido pringado de su sangre le suplicaste fuera fuerte, que no te dejara, que pronto llegaría la ayuda, pero sus ojos se perdían, tomó tu mano antes de decir sus últimas palabras y dar su último beso.
- Mi amor por ti es eterno.
Muchos se lamentaban, lloraban y gritaban como si fuera a responder y tú... ¿tú?
Hasta el más fuerte sentía como te consumías y como morías por él, la imagen tuya sollozando y cubriéndolo, como tratando de protegerlo con tu velo devastaba, le pedías perdón por no protegerle antes, eras tú el blanco de aquel que no pudieron encontrar pero que la vida sabía que vivía el infierno mismo al haber acabado con él.

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San

Algunos habrían dicho que el ambiente de su boda tenía toque elegante y precioso a causa de ese azul crudo mezclado con el blanco y plateado, originalidad tal vez, otros... Notarían la hostilidad en ese entorno, el frío de los colores, lo tétrico y lo gélido del lugar... claro, esa fue la vista de aquel que odiaba en sus adentros verte casada, era el ambiente perfecto para el show que se aproximaba, más no sospecharía que todo se iría en su contra convirtiéndose en algo peor.
Había contratado a alguien que matara a sangre fría al novio, luego te consolaría. San no era tonto, no había confiado nunca en él y para egoísta, egoísta y medio.
Sucedió, se oyó un disparo y un gran vidrio ser roto, al percatarte de que era, tu ahora esposo, entraste en pánico, te arrodillaste sollozando, no podías perderle, no cuando estaban ya juntos.
Al sujeto lo capturaron entre la multitud y frente a todos confesó quien era el autor.
Tu mirada lastimada pasó a una de odio hacia aquel maldito ingrato que te había quitado tu futuro, tu esposo te sonrió en medio de lágrimas y entendiste su intención, el pánico se hizo presente ante todos.
- te amo mucho...
- No, no voy a dejarte ir, no sin mí, prefiero morir.
Juntaron sus frentes y después de un beso lleno de amor y resentimiento... sin dudarlo, él incrustó uno de los filosos vidrios en tu garganta alarmando a todo el mundo, especialmente a quien planeó todo.
Ambos partieron satisfechos dejando miles de caos lejos.

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Wooyoung

No habrías pedido nada más que ese dulce chico a tu lado, era un sueño, y debió haber seguido así.
Era presente una hipocresía pero, ustedes, por ese día querían que todo fuera bello así que confiaron solo en su propia felicidad y no se percataron que no todos estaban felices ahí.
A media ceremonia, debieron no soltar sus manos, te acercaste a algunos de tus invitados sin esperar el filo de la ira que alguien clavó en ti.
Aquel cuchillo se enterró en tu pecho y esa punta mortal se paseó por ahí desgarrándote la piel, en el último y definitivo intento pudiste detener el arma para darle tiempo a Woo.
Cuando un implacable Woo logró apartar el ente malvado, un chorro desbordaba de tu pecho, te cargó para ir rápido al estacionamiento mientras te hablaba y rogaba con miedo.
- No, tranquila. Hey no hagas eso con tus ojos, eres fuerte, mírame.
- Es muy pronto para irme...
- No, no vas a ir a ningún lado te lo prohíbo, si tú lo haces llévame.
- Estoy muy cansada, sé que no voy a salvarme pero... no quiero morir.
Se escuchó un sollozo desesperado y temeroso, rompió en llanto crudo cuando se detuvo para arrodillarse contigo en brazos, él sabía que era cierto aunque se quisiera engañar, tu vida flaqueaba justo ahí.
- No... Qué te han hecho... - dijo tratando de parar la sangre - ¿Por qué? Yo no quiero dejarte ir, no lo hagas, mírame, te amo mucho... no dejes que pase...
- Al menos pude decir adiós...
- Voy a morir también, iré tras de ti, nunca voy a volver a amar t/n:___
- Te debes salvar, eres la única parte real de mí... Te amo.
- No, escúchame, ayuda, ¡ayuda por favor! no, no, no... ¡No!

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Jonho

A ambos les había gustado la idea de acompañar el blanco de su boda con un precioso color vino, era elegante con los detalles dorados también, más ¿fue esa una señal de su destino?
Pronto el suelo del lugar se decoraría con la tinta de un rojo auténtico y combinaría perfectamente con los pétalos de rosa esparcidos.
Rojo, el color del amor, rojo, el color de la pasión, rojo, el color del peligro.
Ustedes conocían a estos tres muy bien, más el equivocado se les fue de las manos, en esta dimensión de tragedia se le da lugar especial al egoísmo, la venganza o la oposición.
Y sucedió, caminaban juntos saludando a los testigos de su amor cuando alguien bien vestido y elegante dijo ir en representación de un invitado, nunca le habian visto.
Nadie se preguntó nada en especial hasta que llamó la atención de los demás invitados los gritos y lamentos de cercanos.
¡Ayuda rápido! ¡No pueden morir! ¡Están muy mal heridos! ¡Los apuñalaron! ¡de prisa o morirán! ¿Alguien vio quién fue? ¿Quién fue?
Gritos y caos a su alrededor, ambos recostados, justo como lo hacían las noches de contemplar estrellas, esta vez ambos se miraban nostálgicos, con sus manos llenas de aquel rojo se acariciaron una vez más y sellado su pacto de amor con un beso, dejaron de respirar sobre un majestuso charco de sangre.
Nadie sabría nunca quien fue y ustedes serían recordados por la mirada feliz en sus ojos, incluso, cuando estaban a punto de morir.

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Quien haya leído (al menos el de su bias) gracias y comenten un puntito al menos, me hará sentir que no soy un asco en esto ♡

Amo la tragedia...