Esta historia se remonta al 2004. Justin que en ese entonces se llamaba Juanito Canche, era mi mejor amigo, estudiábamos en la escuela primaria Masiossare.
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Yo y Juanito regresando de la escuela, íbamos en el turno vespertino.
Pasabanos el recreo jugando tazos, corriendo y saltando por doquier, recuerdo que cada vez que se metía en problemas o era perseguido por la pandilla del barrio, recurría a mi para que lo ayudara, porque ustedes no saben, pero ya a mi corta edad yo era un experto en el arte del kungfu de tanto haber visto todas las películas de Bruce Lee y pues siempre terminaba salvando su trasero de los bravucones, se puede decir que éramos muy unidos y claro, pensamos que la amistad iba a durar para siempre. Juanito Canche tenía muchos hermanos y por ese tiempo estábamos en plena crisis economica, problema que venía arrastrándose desde el llamado error de diciembre y el país iba en picada, así que su padre se dió cuenta de que no podían mantener a 8 hijos 2 perros 10 gallinas (y la casa chica) entre otros gastos. Juanito era un vago y no quería estudiar. Lo que si le gustaba era la música, en las tardes se subía a cantar a un par de microbuses para pagarse el vicio de los chetos, los chicharrones sabor a papas y los juegos de las maquinitas.
Por esa época yo había tenido mi primera novia, la cual por una tontería me dejó y me rompió el corazón, entonces en un arrebato de inspiración le escribí una canción que titulé "nene, nene, nene oh" expresando mis sentimientos, y confiando en mi buen amigo Juan le pedí que con su guitarra me acompañará a cantarle a mi ex, por desgracia no quiso acompañarme, además se burló de mí canción y la llamo ridícula, algo que me lastimó pues se trataba de mis sentimientos profundos en mi corazón.
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