Capitulo 1: ¿Qué eres...?

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Ochako

Cada persona tiene una historia de amor diferente, desde un amor alocado, hasta el más candido. Pues verán, esta es un poco más rara, un poco fuera de los común. Cualquiera en este insípido y vasto mundo me diría que tengo una mente ficticia, pero es real, todas mis palabras y mis sentimientos lo son. 

Late a mil por hora, así de acelerado está mi corazón. Sube y baja, así de agitada está mi respiración. Mi pecho se agrieta, mi estomago se revuelve, y caigo en lo más profundo y hermoso del mundo de los sueños, en donde puedes sentir, vivir, creer, en lo que desees.

Porque tu y yo somos un solo sueño, uno demasiado bello para ser cierto, uno demasiado puro para ser corrompido

Cree en mi. Escúchame y te escucharé. Llámame y atenderé. 

¿Acaso eres lo que siempre busqué? ¿Acaso eres lo que siempre necesité? Esa pizca de emoción cautiva dentro ti ¿Lograré ingresar en tu corazón y hacerla relucir?

Porque yo soy fuego y tu eres agua

Dos elementos que no se pueden fusionar, que juntos no pueden estar

¿Tomarás mi mano y caminarás al abismo conmigo?


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Siento mi corazón bajar su velocidad, la adrenalina disminuyendo, el agua salada en mis pies, el movimiento de las pequeñas olas a la orilla del mar. Tan relajante. Nada mejor luego de un arduo entrenamiento matutino. 

Todos los días, a las tres de la tarde que salimos de la universidad, venimos aquí a entrenar. ¿Para qué? Nada más y nada menos que la competencia anual de Musutafu, una playa que está ubicada en el único borde que tiene tokio con el mar.

Cuando cumplí 14 mi abuelo me enseñó a surfear, salíamos a la playa cada fin de semana. Fue así como conocí a mis amigas con las que ahora participaré en la competencia. Ellas y yo vamos a la misma universidad pero en distintas carreras. Momo estudia para ser profesora, Tsuyu estudía biología animal, Kioka Jirou va por la carrera de música y Mina estudia para ser bailarina.

— Creo que es todo por hoy chicas —hablo la pelimorada comenzando a salir del agua

— ¿A la misma hora mañana? —preguntó Momo

— ¡Sí! Fue tan divertido, pero... ¡estoy muy cansada! —expresó Mina con cansancio ya que había traído un traje diferente, para ser específicas, un bikini

— Sabías que íbamos a surfear y todavía insististe en llevar eso, Mina —le reprochó tsuyu

— ¡Tenía muchas ganas de probarlo!

— Mas vale usar otro tipo de traje de baño apropiado si quieres evitar cualquier accidente mañana. —comentó jirou, siempre ha sido la chica del grupo que actúa como una madre

— Bueno, chicas ¿Tienen hambre? Hay una tienda de bocaditos cerca —intentando calmar el ambiente, la pelinegra habló con una sonrisa

Las chicas avanzaban mientras se secaban y tapaban con toallas. Me limité a observarlas mientras acariciaba la superficie del agua. Miré por detrás, las olas comienzan a crecer. Es el momento perfecto.

Lo que trajo el marDonde viven las historias. Descúbrelo ahora