Me Comprometo A Amarte (SasuNaru)

3. Arma de doble filo

Naruto y sus personajes no me pertenecen, son propiedad de Masashi Kishimoto, pero la historia es de mi autoría.

“Pensamientos de Naruto”

“Pensamientos de Sasuke”

“Pensamientos de Deidara”

“Pensamientos de Itachi”

Capítulo 3. Arma de doble filo

Naruto apenas y podía reaccionar ante lo que acaba de escuchar del azabache que tenía frente a él. ¿No sabe quién es? No podía ser posible, ¿O sí?

“No nos adelantemos. La desesperación es mi peor opción siempre.”

—¿De verdad no sabes quién soy? Soy Naruto Namikaze — le intenta hacer recordar, pero Sasuke se agarra la cabeza con la mano derecha, sintiendo una leve punzada de tan solo intentarlo. Aún así, lo hizo… sin obtener resultados favorables

—En serio, no sé quien eres

—¿Y no recuerdas a tu hermano Itachi o a tu familia? — le pregunta ya no aguantando la desesperación, y Sasuke mira hacia el techo

—No sé de qué me hablas. He tratado desde que desperté, saber porqué razón estoy aquí y de dónde vengo, pero… no sé ni quién soy yo — fue sincero en todo momento, ya que después de todo, si le conoce debe ser por una razón, y tenerle algo de confianza no estaba de más

—Ay no… — sus ojos le empezaron a picar, sintiéndose muy mal. A pesar de cómo que se llevaban, se había tomado la molestia de ayudarle en el accidente — no puede ser cierto… — ahora si sentía tener toda la culpa, ya que por protegerlo, se había fracturado una pierna y había perdido la memoria. Eso jamás se lo perdonaría

Sasuke al verle tan mal se preocupó, llenando su cabeza de varias dudas. ¿Tan mal se sentía al saber que había perdido la memoria?

“¿Acaso soy alguien importante para él? Y de ser así… ¿Quién es él?”

—Hey, no vayas a llorar… eh… ¿Cómo dijiste que te llamabas? — no recordaba el nombre que le había dicho hace un momento

—Naruto Namikaze — respondió, tratando de calmarse

—¿Cómo me llamo yo?

—Sasuke Uchiha

—Y, ¿Sabes cómo llegué a este lugar?

—Sí… tuvimos un accidente de auto. Un imbécil se atrevió a seguir avanzando a pesar de que su semáforo estaba en rojo, y el nuestro en verde — sus ojos se hacían más brillosos, casi no pudiendo retener las lágrimas — tú… me protegiste, por eso saliste tan lastimado… ¡Y no recuerdas nada! — no soportó más y apretó los puños, derramando un par de lágrimas, pensando que no debió recibir tanto daño

Pero al estar de esa forma, solo causa más preocupación e incomodidad de parte del otro muchacho.

—¡Oye! Te dije que no llores. No es tu culpa

—¡Sí lo es! — le interrumpe, molesto consigo mismo — tú estabas enojado conmigo porque íbamos a llegar tarde a la universidad, y todo por no levantarme temprano… — Sasuke estaba medio perdido en ese asunto, pero esa duda de hace unos momentos resonaba en su mente cada vez más

—¿Qué tienes que ver tú conmigo? ¿Qué tipo de relación llevábamos tú y yo? — pregunta con seriedad, dejándole helado

—¿Eh? P-Pues yo… — bajó la mirada hacia el suelo, lleno de nervios, lo cual impacienta a Sasuke — soy… soy tu…