Indiferente

La Carta

La abro y dice así:
"Hola hijo! ¿Cómo estás? Espero que estés bien, se que no nos hemos visto desde hace un año pero, ¡nos vamos a ver el sábado! Y platicaremos de todo lo que ha pasado, de como te fue en Nueva York, iremos a pasear, a comprar ropa a alguna plaza, todo lo que no hicimos en un año, tal vez digas que va hacer imposible hacer todo eso en un día, por eso nos vamos a ver mas seguido. Los extraño tanto como no tienen idea, los amo demasiado. Nos vemos luego.
Los ama su mamá."

Me quedo sin aliento al saber que de nuevo veré a mi mamá, no se que decir, solo me quedo quieto, pero al mismo tiempo los ojos se me llenan de lagrimas.
-¿Qué pasa? -me dice mi hermano de tras de mi.
-Nada, nada -le digo mientras me seco las lagrimas.
-¿que tienes ahí?
-Nada, mira -le doy la caja con la ropa, excepto la carta esa me la guardo en el bolsillo sin que el se de cuenta.
-parece que no se a olvidado de nosotros -me dice con un tono burlón.
-¡claro no nos ha olvidado torpe! -le grito- me sorprende que pienses eso.
-¿Qué esperabas? Ella nos dejo ¿Lo olvidas?
-¡A nosotros no nos dejo! Solo dejo a papá -antes de que pueda decir otra palabra, siento como una lágrima recorre mi mejilla.
-¡Claro que nos dejo! Y tu muy bien lo sabes
-¡Cállate!
-¿Qué está pasando aquí? -interviene mi papá, se nos queda viendo con una mirada tan fuerte que se siente como si te enterraran un cuchillo- , sus gritos se escuchan hasta el otro lado del mundo
-mira -le muestro la carta mientras mi hermano me mira con odio, yo creo que por que no le mostré la carta a el
-me parece bien -me dice con una sonrisa- ¿En dónde y a qué hora se van a ver el sábado?
-¿Qué? ¿Te parece bien? -le dice mi hermano levantando el tono de voz
-así es, me parece bien que pasen tiempo con su mamá, hace un año que no la ven
-pero ella nos dejo -"cállate de una vez por todas" digo en mi mente, ¿por que piensas eso? Aunque me duela decirlo y es la verdad, solo dejo a mi papá- no se por que te parece bien
-su madre solo me dejo a mi, ella y yo aun nos llevamos bien, ella es una gran amiga mía aunque ustedes no lo crean -se me sale una lagrima al escuchar eso- y es por eso que quiero que pasen tiempo con ella Enrique, ella siempre va a ser su madre
-si pero, -mi papá lo interrumpe antes de que él pudiera decir otra palabra.
-sin peros, y siéntense para que almuercen si no se nos va hacer tarde

Nos sentamos en la mesa y desayunamos pan tostado con mermelada, huevos con tocino y un vaso de jugo de naranja, antes de que le pudiera dar el ultimo trago a mi vaso, me llega un mensaje, ¡es de Cesar!