Quien conoce a los demás posee inteligencia; quien se conoce a si mismo posee clarividencia. Quien vence a los demás posee fuerza; quien se vence a si mismo es fuerte.
- Lao ZiPosicionemonos en el siglo XIV. En esta etapa de la historia, los intelectuales pasaron por un movimiento intelectual llamado el humanismo. El humanismo fue la busqueda del conocimiento filosofico i cultural a partir de la edad antigua.
Este pequeño trozo de historia nos llevara a un pueblo de Irlanda llamado Coparda que se dedicaba principalmente a la agricultura. El pueblo conectava con una ciudad nombrada Ricozpo. Ciudad llena de intelectuales que resaltava sobre todas las demas con sus edificios altos, sus maravillosas iglesias, sus bonitos jardines, su bajo nivel de pobreza i su rica cultura.
Charles un adolescente de 15 años, rubio de pelo largo, con los ojos color arcoiris, era un muchacho de complexión fuerte, medía 1,85 metros i tenia unos ENORMES pies. El chico era una persona alegre, divertida, inteligente y atrevida con unos pequeños ataques de ira cada X tiempo. El trabajaba de granjero plantando patatas en el campo de sus padres, tenia a su hermana que le ayudaba en su trabajo, aun que era un poco inutil al menos sabia recoger la mesa que era lo unico que le daba pereza hacer a Charles.
Un dia un carro con lustrosos hornamentos de oro tirado por dos caballos blancos apareció en medio del pueblo de Coparda. De pronto, se abrió la puerta de este, se asomo un pie con un zapato granate y un calcetin blanco muy largo. Entonces, se vio a la persona que salia, era Lord Kessington, un honorable senyor de la realeza de la ciudad de Ricozpo.
Kessington fue recibido por el ilustrisimo alcade de Coparda, Ritchiardio.
El alcalde preguntó-¿Que esta haciendo aqui en este pobre pueblo?-Kessington respondió con un giro de cuello orgulloso hacia el mismo.-Buscaba a algun joven listo y fuerte que me ayudase en unos recados.-
Inmediatamente, contesto el alcade-Ooooooo pues nuestro pueblo posé grandes muchachos con esas exquisitas cualidades.-
-¿Así?-Respondio Kessington con una voz sarcastica y una mirada que se observaba en sus ojos que decia que eran todos unos inutiles come patatas.
El alcalde para evitar responder a esa pregunta y al mismo tiempo pudiese pensar en algun niño que reuniese aquellas cualidades dijo.-Mmm, ya son casi las cinco.¿Porque no nos vamos a tomar el té?-
El senyor dijo- ¡Excelente idea! Vayamos a su casa y hablemos del tema que le comenté antes.- Rapidamente, se dirijieron a casa del señor alcalde.
El senyor Kessington y Ritchiardio estaban sentados en una habitacion llena de ventanas que iluminaban toda la habitación. Un camarero sirvió una jarra de té de la china y se retiró.
Kessington dijo - Mmm que té mas sobresaliente-
El alcalde respondio- Sí, es delicioso y es importado de la china. Por cierto, un pais bellisimo con sus edificios, murallas, campos, templos, lugares...-
El senyor le interrumpio- No nos alarguemos alcalde Ritchiardio. Yo he venido aqui con el objetivo de encontrar a un joven que me ayude. Asi que digame. ¿Que me puede ofrecer?-
Ritchardio penso rapido y contesto- Hay un chaval en la zona norte del pueblo que le podría servir. Se llama Charles.-
Kessington exclamo- ¡Pues vayamos a verle estoy ansioso!-
Ya era por la tarde, Kessington y Ritchiardio se dirijieron a casa del joven. Cuando llegaron Kessington golpeo la puerta de la casa muy finamente. En seguida, abrío la puerta un hombre gordo seboso, con mala cara y pregunto con despreció-¿Que quieren?-
Kessington deduciendo que ese hombre era el padre de Charles respondio-¿Me permite ver a su hijo?-
El hombre dijo- ¿Pa' que lo quieren?-
El noble le contesto-Es un asunto privado-
El padre Charles grito-¡¡Carlo'!!Tiene' visita.-
Se escucharon pasos rapidos que venian hacia la puerta,en seguida Charles llego y pregunto- ¿Que pasa padre?
El padre le miro y dijo- No se estos quieren hablar contigo.- El padre se fue dentro de la casa y no volvio.Charles interrogo-¿Que quieren de mi?
Kessington le respondio- Necesito un ayudante para que vaya conmigo a la corte y haga un par de tareas.-
El joven dijo-¿Yo?Pues va a ser que no. Tengo mucho trabajo en el campo y una familia no la dejaria por nada del mundo. El joven se giro y sin decir nada mas entro en su casa.
Rapidamente, Kessington cogio una bolsa de patatas, se la puso en su cabeza, lo llevo dentro del carro y se despidio del alcalde.
Ahora Kessington y Charles se dirigen a la corte.