Al final del fin de semana.

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Por las insistencias de Wei Wu Xian y sus pequeños chantajes, el chico logra convencer a Lan Zhan salir de la habitación para ir al jardín de la mansión, para ir de paseo a cualquier lugar. Por su parte el Lan se ve más dispuesto a cooperar y fingir que esta siendo chantajeado, ya que al menos su padre conoce su cecreto, Lan Zhan usa el chantaje como excusa para salir de su encierro. En esta ocasión Wei Wu Xian pidió permiso para llevarlo a la playa y como era de esperar, fueron a una de las casas de los Lan, aunque el mayor de los jades insistió en querer acompañarlos, Wei Ying le hizo entender que Lan Zhan necesita salir solo y estar lejos de su familia por unos días, ya que invitaría a unos amigos y la idea es que empiece a socializar y si él estaba presente existía la posibilidad de que el menor de los Lan se aislara del grupo, al final Lan Huan, no fue, comprendiendo que su novio tenía razón.

Al paseo asistieron, los primos de Wei Ying, su tío y el esposo de este, Nie Huai Sang, Wen Nin y su hermana.

Para Wei Ying todo salio como lo esperaba, el joven Lan se involucró mucho con todos a su estilo, con monosílabos, pero al fin y al cabo socializo con todos. Lo que mas le sorprendió a Wei Ying fue verlo sonreír, con esa sonrisa casi inexistente, su animo durante ese fin de semana fue positivo.

Lamentablemente hay que volver a la realidad y esa era regresar a la mansión.

- no es necesario que me acompañes- dice el Lan.

- es mi responsabilidad- contesta con una sonrisa- yo te saque de la mansión y yo debo regresarte....

- regresaras de madrugada.

- no importa- dice el menor tomándole de la mano, ante el movimiento del menor, Lan Zhan le queda mirando profundamente, hubo un rato de silencio entre ambos- ¡lo siento!- dice apartando su mano al darse cuenta de lo que había hecho.

- descarado...

- no me ofendas, no lo hice a propósito, no me di cuenta- sonríe el joven.

- igual eres descarado....

- no seas mala leche, ¡perdóname oh gran sultán, por ofenderle al tocar su piel virginal! - ante la broma el Lan no puede evitar teñir sus orejas de rojo y lo único que hace es voltear la mirada.

El resto del trayecto fue tranquilo, pero a medida que se acercan a la mansión el rostro del Lan se vuelve sombrío y eso hace pensar a Wei Ying que sus esfuerzos fueron en vano.

Al llegar como es debido el joven deja al mayor sentado en el sofá en lo que regresa por la silla, pero nada hacía presagiar el escándalo que se avecina.

Lan Zhan espera tranquilo a que Wei Ying regrese con su silla, para llevarla a su habitación y que luego regrese por él. Nada podía echar a perder su fin de semana, más que su propio regreso a su mansión.

- ¿cómo esta mi sobrino favorito?- saluda con burla, Lan Qi Ren al jade. Lan Zhan inmediatamente le mira con odio parío- yo también te extrañe, no podía dejar de pensar en la oveja negra de la familia, el que ensucio nuestro nombre.

- solo eres un maldito infeliz, juro que te vas a podrir en el infierno.

- respetame- dice agarrándolo del cabello- que no se te olvide que soy tu tío, aunque te duela compartimos la misma sangre- alza su mano para darle al menor una bofetada.

- no se atreva- dice Wei Ying agarrando de la mano al viejo y evitar que este logre su cometido- muy su tío sera, pero eso no le da el derecho de agredirlo.

- ¿quién se atreve....?- pregunta volteándose. Al ver la apariencia del menor, Lan Qi Ren se siente aterrado- ¡¡es imposible!!- le tiembla la voz- yo te..... no voy a permitir que entres a nuestras vidas...- dice agarrando al chico con ambas manos del cuello.

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