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Jake nunca creyó que al sentir un color por primera vez se volvería dependiente de ello, no solo quería, necesitaba verlo diario. Incluso consideró quitarle aquel suéter amarillo a Sunghoon y quedarselo para poder seguir sintiendo ese color tan brillante que amaba por el resto de los días.

Pero una vez aquel chico se lo quitaba, ya no se veía. Volvía a ser una prenda cualquiera de color gris.

"Solo puedo sentir los colores cuando es con Sunghoon."

Su madre no lo creía, pero el aseguraba haber sido capaz de sentirlo, en su ánimo, en la forma en que veía todo, el no estaba loco, realmente estaba ahí, cada que Sunghoon aparecía.

Una semana había pasado desde ese incidente, y tanto Park como Sim habían mantenido algo de distancia.

Mayormente porque Sunghoon tenía miedo de hacer sentir mal a aquel chico con alguno de sus comentarios, y Jake porque no comprendía aún muy bien lo que sucedía cada que el estaba cerca, haciéndolo sentir ese color una vez más.

Lo alteraba, su corazón a punto de explotar y la respiración se le iba de sus pulmones con tan solo pensarlo.

Solo Park Sunghoon lo lograba hacer sentir eso que para el, se trataba del color amarillo.

Ese chico te mira todo el día y todos los días, Hoon. ㅡ Dijo el de cabello rojo. ㅡ ¿Por que no vas a hablar con el? Me da algo de pena que siempre este solo…

No lo sé, Hee, no es que me caiga mal o algo así, pero, nunca he tratado con alguien que tiene ese problema... ㅡ Murmuró Sunghoon, y Heeseung lo miro de manera más seria.

El no es nadie raro, Sunghoon. ㅡ tomo sus cosas de la mesa, mientras se levantaba de esta. ㅡ Es una persona más con sentimientos, el tampoco decidió vivir así. Claro que la vida de el no debe ser tan "normal" a como es la nuestra, pero tampoco eso indica que tengamos que tratarlo diferente o con demasiado cuidado todo el tiempo, solamente ve y házlo.

Está bien. ㅡ Acepto para finalmente despedirse de su amigo, e ir directamente con ese chico.

A pesar de haber estado en boca de todos, Sunghoon no consideraba que esas personas las cuales le hablaban diario eran sus amigos, al único que consideraba así es a Heeseung, el chico alto de cabello rojo, un año mayor que él, y que, bueno, lo conocía desde antes de ingresar a la escuela.

Cuando su mirada pudo divisar los ojos celestes de Jake a unos metros aparte, comenzó a sentirse nervioso.

Mayormente cuando pudo notar el sonrojo en la mejillas de aquel chico un año menor que el, que bajo su mirada en ese instante.

¿Jake? ㅡ Cuestionó con una voz que intentaba ser calmada.

¿Si, Sunghoon Hyung? ¿Qué es lo que sucede?

Bueno, yo... ㅡ El mayor detuvo su frase un momento, realmente necesitaba pensar bien que es lo que diría, si es que quería que todo saliera bien. ㅡ Pensé en venir a saludarte, tenemos unos días sin hablar.

¡Claro! Estoy feliz de que estés aquí. ㅡ Murmuró con calma, intentando levantar la mirada para enfocar el bonito rostro que Sunghoon poseía. ㅡ Disculpa, ¿Podrías moverte de ese lugar? El sol me lastima si intento verte.

¿El sol te hace daño, Jake? ㅡ Preguntó con la única intención de generar un tema de conversación, y también hacer tiempo para sentarse en otro lugar donde Jake pudiera verlo sin lastimarse. ㅡ Podemos irnos de esta mesa si así quieres.

ᴄʜʀᴏᴍᴀᴛɪᴄ ᴄɪʀᴄʟᴇ 𐅼 ᴊᴀᴋᴇʜᴏᴏɴDonde viven las historias. Descúbrelo ahora