El príncipe Jay es obligado a encontrar una esposa. Pero no cualquiera, si no una princesa que esta encerrada en una torre, aunque al encontrarla tal vez no sea exactamente lo que él esperaba.
꒰☁️꒱ adaptación, todos los créditos a @priscila1919.
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El príncipe y sus caballeros se estaban dirigiendo al palacio, al final si logró acomodar a su hermosa princesa con él en el caballo, había necesitado un par de cuerdas, pero él lo había conseguido.
Al llegar al palacio el príncipe bajó a su princesa y la cargó de una manera nupcial.
— ¡Abran las puertas, el príncipe Jay ha llegado! — gritó Sunghoon quien se acercaba a las grandes puertas del palacio junto a Jake, y atrás de ellos iban Jay con su princesa en brazos.
Sunghoon se percató que no le hicieron caso a sus órdenes y él con ayuda de su amigo patearon las puertas del palacio, según ellos para hacer una entrada más épica, pero estás azotaron y emitieron un estruendoso ruido el cual se escuchó por todo el palacio.
El rey y la reina se quedaron viendo la escena confundidos, hasta que vieron a su hijo pasar por la puerta con la princesa en brazos.
— ¡Me caso! — gritó un Jay muy feliz.
— Mis más sentidos pésames.— dijo Jake mientras ponía su mano en su corazón, Jay lo miró de manera amenazante y este hizo una sonrisa nerviosa.
— Felicidades, hijo. — dijo la reina.
— Estamos muy orgullosos de ti. — esta vez habló el rey.
— Lleva a la princesa a tu alcoba, necesita descansar. — volvió a hablar la reina mientras la veía, la postura como Jay lo estaba cargando no lo ayudaba en nada, el pequeño tenía sus brazos caídos y su boca abierta de la cual salía saliva. — Es... linda.— dijo mientras la veía con una sonrisa forzada.
— ¡¿Descansar?! Ha dormido todo el camino, quienes merecemos el descanso somos nosotros y a mí nadie me va a llevar en brazos a la habitación.— se quejó Jake y Jay de nuevo lo amenazó con la mirada.
— Tranquilo Jakey, recuerda que ella no tiene la culpa de que su principe le haya golpeado la cabeza contra el marco de la puerta. — dijo Sunghoon.
— Ni que se le cayera del caballo, dos veces.— recordó Jake.
— ¡Que fue un accidente! — exclamó indignado y subió las escaleras.
Al llegar a la alcoba, Jay recostó a su princesa en la cama, no paraba de admirar su belleza, era lo más hermoso que él había visto. Se perdió viendo los labios de este y quería besarla otra vez, quería sentir el sabor, se acercó y le dio un beso tan tierno, según él, solo que para Jungwon no lo fue, el cual despertó durante el beso y le dio una cachetada haciendo que el principe se alejara de él.
— ¡¿Qué haces?! — preguntó sobresaltado, si seguía despertando de ese modo le daría una ataque nervioso o un infarto.
— Como que ya se te está haciendo costumbre golpearme cada vez que te beso.— dijo el príncipe mientras sobaba su adolorida mejilla, para colmo era la misma que la vez anterior.
