La noche había cubierto la ciudad, por las calles los faroles estaban encendidos tratando de iluminar el oscuro espacio. Star Entretainment tenía todas sus luces encendidas a pesar de estar en plena madrugada, aun había personas dentro, la recepción se encontraba vacía, pero en los pisos superiores se podían escuchar leves sonidos.
En la tercera planta del lugar el estridente sonido de la música sonaba por cada rincón de la segunda sala de baile, esta era un poco más pequeña que la primera, pero fue todo lo que Yeonjun pudo conseguir para seguir practicando.
Desde que había comenzado su entrenamiento hace unos días había podido ver lo exigente que era, había una gran cantidad de aprendices y día a día el número de estos disminuía, algunos se rendían y otros eran despedidos por el mediocre rendimiento que mostraban.
Ese día no había podido asistir a la clase de baile, por asuntos de la universidad y eso no le agradó en lo más mínimo, sabía que no podían despedirlo tan fácilmente como a los otros, ya que, su contrato era diferente, sin embargo no quería que creyeran que por esta razón no se iba a esforzar.
El sudor bañaba por completo su cuerpo, adhiriendo su ropa a este mismo, su cabello yacía mojado por sobre su frente y su respiración permanecía errática. Estaba cansado, sus extremidades de a poco dejaban de responderle, pero no podía parar, no quería parar.
La música se detuvo cuando ya hubo llegado a su final, dándole un pequeño descanso de apenas unos segundos, no estaba conforme, pasó sus manos sobre su rostro con frustración, nada estaba saliendo como él quería, sus pasos eran descuidados y no tenía un buen control de su energía, estaba ligeramente atrasado al ritmo de la canción, cuando miraba su reflejo en el gran espejo de la pared lo único que podía ver era lo pesados e incomodos que se veían sus movimientos.
Caminó decidido hacia su celular volviendo a reproducir la pista que bailaba hace unos instantes.
Una más, solo una más.
Cuando la canción comenzó dio dos pasos hacia el frente y se deslizó hacia un costado, debía dar un giro, pero cuando trató de hacerlo fue cuando sus piernas decidieron que ya no le harían caso, todo su cuerpo se estrelló contra el duro piso de madera quedando completamente tirado sobre este.
Su cabeza daba vueltas y la música comenzaba a sonar lejana, se sentía cansado y sus ojos se cerraron contra su voluntad.
La puerta de la sala de vocales fue cerrada, Soobin se aseguró de que las luces estuvieran apagadas y que todo estuviera en su lugar antes de salir.
No pudo evitar bostezar por el cansancio, metió su mano en el bolsillo de su abrigo sacando de este su celular.
04:32 a.m.
Sí, era bastante tarde. Si tenía mucha suerte podría llegar a su departamento y dormir unas cuantas horas.
Caminó a paso lento hacia el elevador, arrastrando un poco los pies, podía escuchar la música proveniente de una de las salas de ensayo sacándole una pequeña sonrisa, al parecer no era el único que se había quedado hasta tarde.
Estaba esperando que el elevador llegara el piso donde él se encontraba cuando un ruido sordo llamó su atención, parecía que algo había caído. El elevador llegó a su lado mas no subió a este, la preocupación de que algo pudiera haber ocurrido hizo que se aproximara a la sala de baile abriendo un poco la puerta.
En el centro de la habitación el cuerpo inconsciente de un chico reposaba sobre el frio suelo, se acercó hacia él para comprobar sus signos vitales, estaba respirando más su pulso era algo débil, debía llevarlo a la enfermería.
Caminó hacia el celular al otro lado del lugar y después de apagar la música lo guardó en su bolsillo, volvió a acercarse al chico rodeándolo lentamente con sus brazos hasta poder alzarlo al estilo princesa.
Llegó de nuevo hacía el elevador, deteniendo su mirada en el rostro relajado del contario, parecía ser de su edad, sus facciones eran bastante marcadas y eso le hacía ver atractivo, le gustaría haber podido ver sus ojos, le causaba algo de curiosidad.
Mientras bajaba al primer piso soltó un suspiró, le gustaría que aquello le hubiese tomado por sorpresa, pero era tan común que los aprendices se desmayaran por los ensayos, incluso el mismo en su etapa de entrenamiento había ido a parar a la enfermería en repetidas veces.
Bajó del elevador y dobló hacia uno de los pasillos, llegando a una puerta con un pequeño letrero sobre esta.
"Enfermería"
Cuando llegó allí el lugar estaba vacío, algo bastante obvio por la hora, sin embargo, ya sabía qué hacer en estos casos.
Dejó el cuerpo que reposaba en sus brazos en la camilla que estaba junto a la pared mientras buscaba algo de alcohol y algodón, cuando tuvo lo que quería se aproximó al chico de nuevo, pero no pudo despertarlo, no se atrevería a hacerlo cuando su rostro delataba todo el cansancio que sentía.
Asegurándose de que se encontrara bien, tomó una manta de uno de los muebles y lo arropó, dejando a su lado el celular que había recogido en la sala de baile.
Le dirigió una última mirada antes de marcharse, pensando y recordando sobre cómo era estar en su posición. Su cuerpo era tan ligero, seguro no se estaba alimentando como debería.
Salió de la empresa sobresaltándose un poco por el frio del ambiente, preguntándose si realmente todo el sacrificio que hacían valía realmente la pena.
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Mi Sueño Eres Tú |Yeonbin|
Fanfiction《Donde Yeonjun era un gran fan del Idol Choi Soobin, y su más grande sueño era algún día poder besar sus labios》 ⚠️Historia totalmente original. ⚠️No copias y/o adaptaciones sin autorización. ⚜Pareja principal: Yeonbin/Soojun ⚜Pareja secundaria: Tae...