Capɩtųɭɷ 3

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   Capitulo 3

     Miedos

—¿Donde esta mamá?.—pregunto Motka extrañado de no ver a su progenitor en la mesa.

—No se siente bien necesita descanzar ahora.

—¿Que le a pasado?.

—Se siente mal del estomago.

Nadie mas pregunto nada, el tono que uso Magnus bastaba para no preguntar nada mas.

Magnus termino su desayuno y dejó los servicios en el lavaplatos fue a la puerta y en cuanto la abrió vio a un chico.

—¿Que haces aquí?.

—Los abuelos viajaron antes de lo planeado.

—Ya veo.

—¿Mis hermanos?.

—En la cocina lo mas seguro o en sus habitaciones, me tengo que ir ya.

—Claro que te valla bien papá. —el menor paso por un lado de su progenitor pero este le detuvo antes de que entrara.

—Alec esta en la habitación, no a salido de la cama.

—¿Que a pasado?.

—Algo importante y que a su debido tiempo entenderán, por ahora no le bombardeen con preguntas.

—Esta bien.

Magnus soltó el brazo de su hijo y salio de la casa, el menor subió las escaleras y vio a sus hermanos menores pegados en la puerta de Alec.

—¿Que hacéis?.

—Mamá no deja de llorar.—dijo Max serio.

—Papá dijo que se sentía mal de salud.—dijo Motka.

—Apartaos canijos, ¿aun andáis en pijamas?, iros a cambiar hablare con mamá.

El mayor entró y cerro la puerta en las narices de sus hermanos, vio como Alec veía sus manos, como si se sintiese impotente, avanzo hasta sentarse aun lado de su progenitor.

—¿Qué sucedió?.

—Nada de que alarmarse.

—Mamá te conosco, no te cierres así se como eres.

—Me siento impotente mas que nunca, siento miedo y terror pero no como la gente normal, se lo que pasa, no le tengo miedo a la oscuridad viví en ella, no temo por cosas paranormales o películas de terror fui criado para ver el miedo delante de mi para ver las cosas como son de verdad, lloro a pesar de que no debería hacerlo, viví sabiendo que no debo de sentir terror angustia o miedo pero ahora... Siento miedo he impotencia, las pesadillas me atormentan mi vida vuelve de nuevo, la oscuridad me persigue mis demonios vuelven al igual que mi inseguridad, ya no se que hacer.— el ojiazul se soltó en un llanto, su hijo mayor lo vio con dolor y lo abrazo.

—No se que habrá pasado, pero tuvo que haber sido importante, ¿lo saben mis hermanos?.

—No.

—Ya veo, se que papá y tu intentan cuidarnos así que sea lo que sea mis hermanos y yo se los perdonaremos, ni siquiera sentiremos reencor ya que sabemos de antemano que lo hacen para protegernos, tu siempre has sido fuerte eso nos lo has demostrado en todos estos años, no te permitas caer por algo que ya superarse eres fuerte.

El menor vio a su progenitor con una sonrisa, Alec le devolvió el gesto con pequeñas lágrimas cayendo de sus ojos, abrazo a su hijo y suspiro.

(...)

La casa Bane estaba a oscuras todos estaban durmiendo tranquilamente, los cuatrillizos dormían tranquilamente en sus habitaciones. Mientras que en la habitación de los mayores se podía ver como el ojiazul tenia pequeños espasmos.

Gimoteaba bajito y  podía ver todo lo que había vivido anteriormente, los abusos que tuvo por parte del ojidragon, la oscuridad que veía mientras Cal lo controlaba, el daño que había hecho a su parabatai hermana y conocidos, el daño que le había hecho a su pareja, todo se arremolinaba en su cabeza y le hacia sentir un dolor en su corazón, se removía intranquilo en la cama viendo todos esas imagenes pasar por sus ojos.

Se despertó gritando fuerte y desgarradora mente, lloraba a la vez que seguía gritando, sintió como unos brazos lo rodeaban pero el seguía removiéndose hasta que escucho la voz de Magnus había empezado a calmarse pero aun lloraba, la puerta estaba abierta y pudo ver a sus pequeños alrededor de la cama, oculto su rostro en el pecho de Magnus mientras intentaba ahogar sus sollozos y recibía las caricias que le daba el mayor.

(...)

Alec estaba recostado en la cama junto a Magnus quien lo abrazaba, suspiro y oculto su rostro en el pecho del mayor.

—¿Estas bien?.—no respondió tan solo asintió.—Alec...

—No pasa nada.—respondió con voz ahogada.—Estoy bien a sido solo una pesadilla.

—Lo se pero me preocupa, ahí no puedo ayudarte y sabes que no me gusta verte sufrir Alec.

—No volverá a pasar no te preocupes de mas.

—No me pidas eso.—suspiro.—He estado pensando en volver a Brooklyn a mi antiguo departamento, no nos podemos quedar aquí.

—Pero Magnus, aquí están todas nuestras memorias con los niños, los criamos aquí también.

—Lo se por eso no venderé esta casa, la dejaremos como casa de campo nada mas, por ahora creo que seria mejor regresar, ahí los podre proteger mejor.

—Si es así esta bien no hay problema alguno.

El ojiazul vio al ojigato y le dio un casto beso, el asiático sonrió y acarició los oscuros cabellos de su pareja para luego abrazarlo.

—Te amo.

—Yo también Alec..—suspiro y abrazo al nefilim.—Siempre lo haré.—susurro.





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Es corto lo se pero no me daba para mas en este cap -3-

I Belive in Fairy Taʟɛs (malec #2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora