Dejó
de usar abrigo
cuando descubrió
que el frío,
venía de adentro
y ahora sólo espera
entre caladas y penas
que el cigarro la consuma
y la vuelva espuma
quizás así, finalmente
desaparezca
eternamente.
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Lamentos de madrugada
Teen FictionElla fumaba, en las madrugadas. Y escribía, sus lamentos.