Segundas oportunidades

Capítulo 5

Capítulo 5 ||

Pinegrew Manor - 14 º del mes de agosto

Inquieto, Harry picoteó su comida. Habían pasado otras dos semanas desde su cumpleaños. Al principio había esperado que después de la pelea entre Roxanne y Dumbledore su relación con Daphne mejoraría, que después de su diminuta señal de compasión ella se abriría a él. Pero estaba sucediendo todo lo contrario. Cuanto más trataba de ser su amigo, más ella se alejaba, escondiéndose en un caparazón de tristeza. Realmente lamentó su actitud. Una parte de él había esperado que la Daphne que había visto por un momento hace un año fuera la verdadera Daphne: amable, dulce y compasiva.

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Hasta ahora había sido una lección fantástica. Hagrid no solo les había mostrado una serie de majestuosos hipogrifos; de hecho, le había dado a Harry la oportunidad de montar en Buckbeak, el fuerte semental líder de la manada. Pero luego se fue al sur increíblemente rápido. Draco Malfoy el imbécil se sentía demasiado alto y poderoso para seguir las instrucciones de Hagrid. En cambio, insultó a la orgullosa criatura y recibió una patada a cambio.

" ¡Draco!" Gritó Pansy, tal vez la única persona a la que realmente le importaba el bienestar del idiota, no es que él lo apreciara hasta ahora.

" Atrás, Buckbeak, atrás," Hagrid se interpuso entre el agitado Hipogrifo y Draco, que estaba tirado en el suelo, gimiendo y haciendo alarde de estar cerca de la muerte. La cabeza de Hagrid pasó de Malfoy a Buckbeak, sin saber realmente qué hacer, y entró en conflicto entre calmar a su amado Buckbeak y curar las heridas de Malfoy.

" Cálmate, Buckbeak," alguien de repente dio un paso adelante. Pequeña, cabello negro, niña... lo notó en ese orden. Harry necesitó un tiempo para conectar la cara con un nombre: Daphne Greengrass.

" Cálmate, Buckbeak," repitió, antes de lanzar un hechizo relajante. Harry no necesitaba escuchar el comentario de Hermione o ver el rostro de Hagrid para saber cuán improbable era que ella tuviera éxito con el hechizo. El hechizo calmante común difícilmente estaba destinado a usarse en un animal, mucho menos en una criatura mágica como el hipogrifo.

" Eso no..." Hagrid se detuvo cuando Buckbeak de repente se detuvo para resistir. Se calmó en segundos y ni siquiera se acobardó cuando la chica, después de una breve reverencia, se puso a su lado y comenzó a acariciar su pelaje. "Cálmate, Buckbeak. Ya no es una amenaza. No es tu culpa."

Aparte de Draco, todos la miraban, sin creer cómo reaccionó la criatura. Con mucho cuidado, apoyó la cabeza contra su pecho, obviamente instándola a acariciar su cuello. Daphne obedeció y después de un minuto solo los gemidos exagerados de Draco hablaron de los eventos anteriores.

" Me estoy muriendo. Él me mató".

" Lo siento, Buckbeak, estoy de vuelta", susurró Daphne, antes de darse la vuelta y caminar hacia su compañera de piso. Ella suspiró profundamente: "Deja de lloriquear, Draco. ¿O debo decirle a Astoria qué clase de maricón es su prometido? No te ofendas, Pansy", agregó después de un segundo.

Draco mostró su brazo sangrante. Harry tuvo que admitir que era un corte profundo. "Casi pierdo mi brazo por esa bestia asesina". Buckbeak chasqueó el pico con enojo.

" ¡No seas patético!" Daphne comenzó a lanzar un hechizo curativo, pero Draco la detuvo apresuradamente.

" No, necesito ir a la enfermería. Solo Madame Pomfrey puede curar esto."

" Te comportas como un niño de cinco años, Draco. Incluso Goyle podría curar esto." Reflexionó por un momento. "Está bien, tal vez no. Pero como quieras, sigue tu camino."