Donde Liv se muda a Forks y empezará una aventura que espera, no tenga final.
O
Donde 3 vampiros encuentran a su compañera de vida.
Inicio: 12 de noviembre
Fin: -
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Las nubes tapan las ventanas del avión para finalmente revelar la ciudad Esmeralda: Seattle. Se siente el típico movimiento del avión para posteriormente ver como las luces de que nos podemos sacar el cinturón, se iluminen.
-Eso estuvo diveltido -mi pequeño hermano Draco dice con una pequeña risa, sin poder pronunciar del todo bien la R.
-Sí cariño, lo estuvo -le doy una pequeña sonrisa.
La voz en los altavoces nos anuncia que podemos empezar a descender del avión. Mi papá se pone de pie para sacar las maletas de mano y posteriormente Kaiden las recibe.
-Bien tesoros, momento de empezar una nueva aventura.- Papá está encantado con la idea de mudarnos, después de años viajando de un lado para otro, yo también lo estoy.
-Solo espero que no se nos pierda Draco en el aeropuerto. -Kaiden, siempre con pensamientos tan positivos.
-¡¿Que yo, qué?! -exclama medio asustado mi hermanito.
-Kaiden, eres un imbécil.
-Liv, lenguaje, por favor, Kaiden, deja de molestar a tus hermanos. -Suplica papá.
-Lo sentimos -murmuramos al unísono.
Kaiden y yo tenemos el súper poder de sacar a papá de sus casillas en cuestión de segundos, en mi defensa, Kaiden empieza. Descendemos del avión en silencio, solo escuchamos a Draco murmurando una canción infantil; ese niño es una ternurita andante. Terminamos con los registros correspondientes para luego dirigirnos al taxi aguardando por nosotros para dirigirnos a Forks, un pequeño pueblo.
Pasan aproximadamente 4 horas de viaje que se sienten como 10, estar encerrada en un carro con mi hermano buscando cualquier motivo para que lo empuje por la ventana, las canciones cantadas por mi hermanito, los lamentos de mi papá de qué le hizo a Dios para tener que soportarnos y la cara del conductor que definitivamente debería obtener una buena propina después de esto. Llegamos a la entrada de Forks, amén. 15 minutos después llegamos a nuestro nuevo hogar a partir de hoy; una bonita casa de dos pisos color celeste pastel, está frente a nosotros cuando el auto se detiene.
-¡Al fin! Gracias Dios, sabía que no me habías abandonado del todo. -exclama papá bajando a toda prisa del auto.
-¡Hey! -Kaiden y yo le exclamamos mirándolo indignado.
Felizmente Draco quedó dormido, de lo contrario, tremendo drama se le venía encima a papá.
-Los amo tesoros, pero a veces son terriblemente insoportables, sino me creen, pregúntenle al conductor que tenía cara de querer matarlos.
Miro de reojo al conductor que tenía una cara notoria de enojo por lo que decido no protestar y darle más motivos al chofer de que me pase el carro por encima, aunque es tentadora la oferta, no la tomaré.
