#22 | Asignación

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Descargo de responsabilidad: Todos los personajes de Naruto no me pertenecen le pertenecen a Kishimoto-sama.


"Oye, Jiji. ¿Preguntaste por mí?" Naruto dijo en saludo cuando entró en la oficina y Hiruzen sonrió.

"Lo hice, Naruto. Como saben, el examen Chunin se llevará a cabo dentro de tres semanas y en aproximadamente una semana más o menos, los competidores de las otras naciones comenzarán a llegar. Como tal, me temo que es una situación de 'Todos los cuerpos a las paredes'. Todos los rangos D serán hechos por ..."

"¡Muere!"

Naruto giró y agarró al intruso sorprendentemente pequeño, arrojándolo contra la pared incluso cuando surgieron tres clones. Cuando el atacante se recuperó, los clones se cerraron en él ...
... luego desapareció en un destello de luz.

"... Creo que ese era mi nieto ..." Hiruzen finalmente lo logró. "¿A dónde lo enviaste?"

"Campo de entrenamiento nueve". Naruto dijo con un guiño. "Yo ... tienen un acuerdo con Gai, hecho después de la misión Wave. Si me encuentro con alguien que considero una amenaza para Konoha, convoco a Gai y a su equipo para que me ayuden o, si puedo, envío la amenaza a Gai para que la trate. ¿Tu nieto?"

"Konohamaru". Hiruzen dijo, moviendo sus manos en una serie de sellos complejos mientras miraba la bola de cristal en su escritorio. "Solo espero que ..."

La voz de Hiruzen se desvaneció cuando se formó una escena en la pelota, una escena centrada en el joven que Naruto había enviado reflexivamente para enfrentarse a uno de los shinobi más letales de Konoha.

Un niño que había sido inmovilizado en un poste de tiro a través de una docena de kunai bien lanzados fijando su abrigo, pantalones y bufanda para que no pudiera moverse mientras Neji lo miraba desde apenas seis pulgadas de distancia, su byakugan completamente activo.

"Naruto, creo que necesito rescatarlo". Hiruzen suspiró. "¿Si me acompañarías?"

Naruto asintió, convocando a dos clones más.

.

Konohamaru se habría sorprendido de no haber vaciado su vejiga si hubiera tenido un solo instante para pensar en algo más que en la horrible situación en la que se encontraba.

Se había escabullido de su tutor e intentó emboscar a su abuelo nuevamente, solo para ser interceptado por un borrón naranja que había hecho que el mundo parpadeara a su alrededor, dejándolo caer al suelo justo a tiempo para ser agarrado por un borrón verde y arrojado contra un poste de madera, impactando en el instante exacto en que una verdadera ventisca de kunai lo inmovilizó (sin sacar ni una sola gota de sangre) y ahora él estaba mirando aterrorizado a un par de ojos en blanco que parecían estar pesándolo y encontrando que no valía nada.

"Bueno, esta es una situación interesante en la que te has metido". Una voz gratificantemente familiar comentó y Konohamaru trató de apartar la mirada de los ojos deslumbrantes, pero no pudo.

"Vv-Viejo...?"

"Puedes dejar de mirarlo ahora, Neji". Hiruzen se rió entre dientes y Konohamaru se hundió de alivio cuando los ojos se apartaron, dejándole ver que había sido un adolescente mayor quien lo había estado mirando y no el Shinigami como había pensado. "Tenten, excelente trabajo con el kunai. Creo que los recompensaré a todos marcando esto como una misión improvisada de rango D".

Un Genin sin EquipoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora