CHICANA [MAX VERSTAPPEN]

06.

17 de Julio 2020
Londres, Inglaterra

Amarró el nudo de mi pantalón de chándal y saco la liga que agarra mi cabello. Me gustan las ondas que se forma cuando cae por mis hombros

-¿Tu también vas a salir?- me pregunta Nick aún abrochando su camisa

-Si...

-Se que no te debería de preguntar con quien, porque se qué hay confianza entre los dos, ¿pero podría saber con quien vas a salir?- me pregunta rodeándome con sus brazos

-Con un amigo...

-¡Oh! ¿Ahora sales con amigos?- suspiro e intento pensar inteligentemente

-Si, tu dijiste que había confianza entonces no hay problema- voltea quedando pegada a su pecho- ¿o si?

-No. No hay ningún problema

-Que bueno...

Porque si hubiera algún problema no lo cancelaría solo por ti

-Que bueno que tú confías en mi, así como yo confío en ti- sonrío dándole un corto beso en la mandíbula

-Tienes razón. Porque al final de cuentas solo somos tú y yo- me dice tomándome de la mano

"Solo tu y yo"

Eso me perturba tan solo pensarlo, porque se que en el fondo no solo somos el y yo. Porque tengo a Max...solo a Max y con él creo que es suficiente

....

Toco dos o puede que tres veces su puerta, hace frío, tengo hambre y solo quiero abrazarlo

-Hola...-lo veo abrir la puerta pero ni siquiera lo saludo, solo me dejo caer sobre el- ¡Wow! ¿A qué se debe esto?

-Lo siento, solo necesitaba abrazarte- le digo aún sin separarme de él

-No te disculpes cuando sabes que necesitas algo. Nunca lo hagas Virginia

-Entiendo- me separo de él por fin mirándolo a los ojos- Hace mucho no nos dábamos un abrazo. Enserio, habrán sido 10 o nueve años

-Si, bueno, nunca es malo darnos uno de vez en cuando- me dice cerrando la puerta- al menos en nuestro cumpleaños

¿Qué pasó con esos abrazos del oso Max?

Pensar en esos años cuando aún era un niño me hace sonreír inconscientemente

-¿Y que vamos a hacer?- pregunto sentándome en su sillón

-Lo que la señorita quiera hacer. ¿Que quieres hacer?

-Quiero tener sexo Max- le digo a lo que él se sorprende. Se que es algo que no le andas diciendo a todo mundo y menos en un momento como este- el otro día, cuando fui con mi psicóloga me pregunto si yo quería acostarme con Nick, ella no se arrepiente por haberlo echo con la persona que lo hizo

-Bueno, yo....

-No me interrumpas, por un demonio. Deja acabar de hablar- pongo mi dedo en su boca- El día que antes de decirle a Nick que era virgen, él me tocó...

-¿Te tocó? ¿Y tu estuviste de acuerdo?

-Si, y lo que hizo me gusto. Todo eso fue diferente, algo que solo yo había experimentado, ¿me entiendes?- asiente indicándome a qué siga hablando- ahora, solo no se que hacer- me recargo en su hombro sintiendo esa tranquilidad que me provoca el- hoy antes de irme, me dijo que solo éramos el y yo

-¿Tu y el?- me acomodo mejor a su lado viéndolo ahora los ojos

-Pero eso es mentira, porque él no es el único en mi vida- mi mano derecha va a su cabello jalándolo un poco

-Si, es mentira. Porque tu no solo lo tienes a él- acerca un poco su cara a la mía. Mi vista abandona sus ojos para bajar a sus labios y volver a esos ojos que me encantan-, me tienes a mi Virginia y nunca vas a estar sola si me tienes en tu vida- siento su cara tan cerca que ahora nuestras narices se rozan

Sabes lo cerca que estás de él

Sabes que eso provoca esas pequeñas cosquillas en tu estómago

Sus labios se acercan a los míos, se sienten suaves y cálidos cuando hacen contacto y tal vez sea el momento o solo eran las ganas porque esto pasara desde hace mucho tiempo, pero la forma con la que empezó a mover sus labios y sus manos recorriendo mi cuello me hicieron olvidarme de todo. Incluso de que él y yo solo somos amigos

Pero sentir la presión de sus labios contra los míos evita que cualquiera sea razonable en un momento así. Sus manos bajan hasta mis piernas elevándome un poco para poder quedar sentada sobre él, para después sentirlas subir por mis muslos y escabullirse por mi espalda sintiendo sus palmas frías hacer contacto con esta. Mis manos abandonan su cabello para bajar a su pecho, yo solo quiero estrecharme más a él y sentir ese calor que me provoca

Su boca sabe a cómo si hubiera tomado una gran taza de café. ¡Y me encanta!

Sus manos aún siguen en mi espalda, pero tan solo como si leyera mis pensamientos se empieza a mover dejándome recostada bajo él. Su boca baja hasta mi cuello, donde no solo besa sino, muerde. Su cabello me pica un poco la cara y su creciente barba me hace cosquillas en el cuello

-¿Puedo quitarla?- me pregunta agarrando mi sudadera

¿Esto está bien?

Tal vez no

-Si, quítala- lo hace para después posar su boca en lo que sobresale de mi brasier. Se siente bien, se siente más que bien

Empieza a dejar cortos besitos desde mi pecho, mi cuello, hasta volver a subir a mi boca volviéndome a besar

Te das cuenta que tu lo estás besando con la misma intensidad

Pero no te interesa pensar en eso ahora mismo

Su mano deshace el nudo de mi pantalón que me había costado tanto trabajo amarrar. Sus dedos acarician mis piernas desnudadas por debajo de mi pantalón

-¿Está bien si te toco aquí?- sus dedo rozan mi intimidad sobre mis bragas provocando un cosquilleo como el de la otra ves

Asiento con la cabeza. En estos instantes mi mente solo se concentra en el momento, la dulzura con lo que lo hace y lo tibio que es su cuerpo sobre el mío

Sus dedos se meten dentro de mis bragas. Recuerdo aquel día, Nick no había llegado tan lejos. Pero Max...me gusta hacia donde va esto. Se siente bien, sus dedos me tocan mi punto sensible, ese que solo te hace querer más

-¿Puedo meter uno?

-¿Un dedo?- asiente- Si...

Tranquila, no te va a matar

¡Demonios! Escucho mis propios gemidos salir de mi boca, esos que no creí que en algún momento de mi vida conseguiría sacarlos frente a un hombre, pero sus dos malditos dedos se siente como la gloria. Mis manos recorrieron su espalda baja hasta subir a sus hombros, muevo un poco mi cuerpo solo para que acelere sus movimientos pero también para volver a sentir su ereccion rozar junto a mi

Mentira, claro que me va a matar
Pero solo de placer

Dejo de sentir esa fricción haya abajo antes de que vuelva a hablar

-No se bien que es lo que estoy haciendo, pero siento que debo ir más despacio

-Tampoco lo se, pero siento que eres realmente bueno en eso

En ese momento lo veo sacarse la playera y después los pantalones. Y es hay cuando miro al suelo y veo la ropa tirada como si fueran trapos viejos

-Voy a ser delicado. Si te molesta o te duele, solo dímelo y paro

¿Parar?
No, solo no quiero que hagas
Pero...

Yo podría detener todo esto, podría creer que estamos llegando muy lejos

Pero, ¿por que lo haría si se siente como el maldito paraíso?