Luz Noceda, una una chica de 17 años, que es completamente diferente a los chicos de su escuela, ya en su último día de su preparatoria fue enviada a un mundo completamente diferente, que solo en libros de ficción encontraría..
Pero lo que no se esp...
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17 años después, en cierta Preparatoria:
Una enfermera salía de su coche, estando un poco frustrada, pues es la era la tercera vez en esta semana, y su trabajo en el hospital no le ponía las cosas fácil, la mujer de tez morena y cabello negro, toma su bolso y se dirige a su destino, aquella puerta de detención que ya a conocido bastante veces, al entrar se encontraba el director, y su razón de venir..
-Hola ma*Dijo la adolescente sentada de mala manera en una silla, su chaqueta verde, camisa de rayas de morado y blanco, pantalones azules, gorro gris, una apariencia un poco rebelde según su madre*-
-Y esta vez, dígame porque me ha llamado, señor director*Dijo la madre para sentarse en una silla al lado de su hija*-
-Señora Noceda, esto ya es preocupante*Dijo el director de la preparatoria, que era un señor de unos 40 años* Tengo que decirle que luz, se metió en otra pelea, ya es la sexta en esta semana, aunque su rendimiento académico sea muy bueno, no podemos permitir que este tipo de conducta siga así-
-Me quitaron mi libro, y no querían devolverme el libro, además que me empezaron a empujar, ellos empezaron todo, solo me defendía*Explico la joven de una forma algo brusca, pues era la única que mandaron a detención, no era justo, también los otros andaban molestando*-
-¡Luz!, ¡Cierra el pico!*Dijo de forma amenazante su madre, está a regañadientes se tranquiliza a mala gana* Lo siento director, debe estar muy estresada, porque ya mañana es la final de preparatoria para su clase, puede dejarlo pasar, solo por esta vez*Pidió amablemente la señora*
-Esta bien señora Noceda, solo porque mañana será su último día de escuela, Pero si luz se mete en problemas en el último día de este año escolar, juro que mandaré a un campamento obligatorio a Luz l, para reforzar la conducta, que dura todo el verano, entendiste jovencita-
-Si*Dijo de mala gana, y así madre e hija se retiran para poder ir a su auto*-
El camino hacia casa fue silencioso, Luz solo miraba hacia una ventana, esperando el regaño de su madre, ya era algo muy común en ellas dos, solo lo esperaba
-Luz, otra vez peleas, que dijimos sobre eso Luz, tienes que contenerse*Dijo su madre, pero su hija ni se inmuta antes la palabras de su madre, solo miraba la ventana de forma indiferente*-
-Ahora me aplicas la ley del hielo mija, tu tienes una fuerza demasiado grande, y que pasaría si dañaba en serio a alguien, acaso no sabes lo problemas que causarás, acaso piensas en lo puedes causar hija*Su madre estaba algo molesta, pero tiene que controlarse, ella a intentado aconsejar a su hija pero sigue igual*-
-¡¡Esto no pasaría si fuera normal!!*Dijo al fin luz, estando bastante dolida* ¡Crees que no lo intento!, ¡¡Pero cada día eso imbéciles!!, no me lo ponen fácil, no es fácil ser paciente, no es fácil contenerse, ¡¡Cuando todos en esa estúpida escuela me trata como un maldito fenómeno!!*Dijo lo último gritando*-
