Cosas que hace Jeon Jeongguk cuando está celoso || GgukJin ✔️

↳📝 Ser brusco conmigo².

El labio inferior de Kim temblaba ligeramente mientras se acercaba a pasos lentos hasta su novio que estaba sentado en el borde de la cama, una vez estuvo cerca tomó lugar en su regazo bajando de a poco la mirada con un tierno puchero que el menor se moría por besar en esos momentos.  

—Has sido un niño malo, hyung. Creo qué mereces un castigo para que aprendas a comportarte. —habló con tono serio el maknae acariciando la sonrosada mejilla disfrutando del ronroneo que daba su mayor ante el contacto. Parecía un bonito gato.  

—Sí... —solo dijo eso ocasionando que el menor frunza el ceño con desacuerdo para luego musitar un "¿sí, qué?" la vergüenza hizo acto de aparición provocando que el mayor mordiera su labio inferior—. Sí, papi.

Satisfecho el maknae empezó a acariciar los lechosos muslos sintiendo a su novio estremecerse con su tacto tan delicado y placentero. Los calientes labios se presionaron en su cuello dejando marcas de amor que demostraban propiedad sobre el pequeño peli castaño, las prendas empezaban a molestar para la pareja por lo cual el menor detuvo sus caricias por un momento para luego dejar a su hyung recostado en la cama.  

—Vamos, hyung, déjame ver ese lindo culo que tienes —eso sonó tan sucio, provocando que Jin tenga que reprimir un gemido que seguro saldría desde el fondo de su garganta al oír la voz masculina hablarle con tanta autoridad. Cumplió la orden con rapidez—. Vas a contar conmigo, hasta cinco.   

La palma del dominante se impactó en los lindos glúteos del mayor provocando que este tomara un leve color carmesí, así fueron contando los azotes hasta llegar al número cinco. El maknae se quitó los zapatos y pantalones para luego subir a la cama y sentarse pidiéndole a su mayor que vuelva a su regazo.

Amaba esa posición.  

—Últimamente haz desobedecido mucho a mis órdenes, pequeño. Así que espero estés preparado para lo que se viene —el mayor asintió con algo de timidez, al lado del menor él se sentía como un niño inocente a punto de ser corrompido—. Vamos, papi quiere ver como te masturbas.  

Seokjin dirigió una mano a su erecto pene y la otra hacia su boca, chupando obscenamente tres dedos para deleite de la vista de su novio, quien a su vez masajeaba la creciente erección que tenia. Su mano hizo un vaivén suave en su pene, dejando salir gemidos de puro gozo ante el placer que él mismo se otorgaba, luego quitó los dedos de su boca para guiarlos a su algo estrecha entrada acariciando allí metiendo despacio el primer dígito.  

—Ah, papi. —gimió moviendo ahora tres dedos dentro de su orificio anal y aumentando el movimiento en su pene sintiendo como su vientre bajo se contraía poco a poco buscando una liberación pronta—. ¡Ngh, papi! —chilló una última vez corriéndose sobre su propio abdomen.   

—Buen chico. —acarició su plano vientre llenando dos de sus dedos de esperma para luego llevarlo a la caliente boca del mayor quien sacó su lengua envolviendo los largos dedos chupando su propio sabor, el morbo solo encendía más la situación. Quería todo de su papi—. Ahora date la vuelta.  

Aún en el regazo de su novio se puso de espaldas sosteniéndose de las rodillas del contrario. Sintió las fuertes manos envolverse en su delicada cintura elevándolo despacio para luego bajarlo. El glande rojo e hinchado presionando contra su orificio hizo que un caliente gemido salga de sus labios, una vez estuvo dentro por completo dejó que el menor guiase sus movimientos de arriba hacia abajo.  

—Hazlo tú solito, quiero ver como brincas sobre el pene de tu papi. —no espero más y obedeció la orden empezando a mover sus caderas con rapidez sobre el erecto pene que salía y entraba sin piedad produciendo un sonido parecido de una cachetada al chocar contra su culo. Jeon por su parte se mordía el labio inferior soltando maldiciones y gemidos, su hyung se veía tan caliente de esa manera, su espalda blanca sudada arqueada y su delicioso orificio tragándose sin descaro su pene.  

—¡A-Ah, papi! ~ ¡Ngh, m-me gusta así! —chilló al haber tocado su próstata con las penetraciones, sus labios estaban rojos de tantos morderlos, sus mejillas y orejas tenían un color carmesí mientras que su cuerpo empezaba a perlarse en sudor. Las fuertes manos de Jeongguk en su cadera haciéndole subir y bajar con rapidez le impedía pensar correctamente—. ¡Y-Ya no puedo más! Me correré, papi, ah.  

Jeongguk arremetió fuertemente contra la entrada del mayor rasgando su próstata exquisitamente. Y con unas cuantas penetraciones más su orgasmo llegó haciéndole perder la noción de todo y solo un nombre repitiéndose en su cabeza: Jeongguk. Sus paredes aprisionaron el pedazo de carne dentro suyo provocando con ello la eyaculación dentro de él, bajó un poco la cabeza con la respiración agitada como si hubiera corrido un maratón. 

—Bebé, haz hecho un increíble trabajo. —habló besando su blanquecina espalda para acurrucar al mayor en su pecho mientras besaba sus cabellos mojados por el sudor. No importa cuán dominante y serio se comportara mientras tenían relaciones, siempre volvía a ser el dulce Jeongguk que cumplía sus caprichos sin importar cuales sean.  

(.......)    

—Creo que debería ir a un psicólogo después de esto —habló el segundo de la maknae line mirando hacia la puerta de la habitación de Jeon y Kim—. Jamás los veré igual.   

—Querido diario, hoy ha sido un día genial. —habló Hoseok con una enorme sonrisa y su celular en mano.   

Sin duda eran un grupo muy particular.    

   

-jeonseokjinniee.