› rᥙdᥱ · jᥲყkᥱ﹗

- 🐠 one

박종성 ¡!

❛ JAY ❜

No es un secreto que Jay no era el tipo más social en la universidad, pero, ¿por qué? Los alumnos nuevos se preguntaban al ingresar, el chico tenía todo para ser el típico popular fuck boy de los clichés. Un rostro perfecto, un cuerpo fitness, espléndidamente hábil en el equipo de hockey. ¿Cuál es el problema entonces? Fácil, a Jay le desagrada cualquier tipo de persona. o cercanía a excepción de su pequeño novio que tanto ama. Shim Jake había escuchado tantas formas de decir te amo en el mundo pero la de su novio Jay era simplemente para indignarse pero por suerte cierto castaño es la cosita más dulce que sólo puede atinar a reírse de lo borde que es su novio.

-¡Jay compañero mío, muy buenos días!- Saludó Yang Jungwon con ciertas energías que irritaban al pelinegro, él se sentó justo en la butaca detrás de Jay quien lo ignoró olímpicamente colocándose los audífonos.

-¡Agh! ¡Ese bastardo hijo de..

-¿Acaso dijiste algo?-Interrumpió bruscamente dándose la vuelta para verlo cuando le escuchó decir algo, Jungwon tragó saliva negando rápidamente.

-¡No, no! Dije que el maestro es un bastardo porque nos encargó una exposición para hoy y yo no pude hacerla.

-Te pregunté que si dijiste algo, no quería que me contaras toda tu vida.

Y sin más se giró nuevamente para colocarse los audífonos, faltaban aproximadamente diez minutos para que comenzarán las clases. Maldijo por lo bajo ya que el pequeño mocoso de su novio era un irresponsable que dormía mucho, los alumnos restantes seguían llegando y Jay sólo se dedicaba a mirarlos con desagrado por aburrimiento, el reloj se consumía rápidamente para su mala suerte. Por último, el maestro de la clase hizo presencia en el aula sentándose en su escritorio, notó que hacía ademanes dirigiéndose a él así que se quitó los audífonos exasperado.

-¿Qué?

-La clase ha comenzado, Jongseong. Guarde esos audífonos o tendré que llevarlos conmigo ahora mismo, ¿Entiende? Escuche sus canciones depresivas después.

-Faltan dos minutos para que la clase comience. - Le respondió señalando el reloj, el profesor frunció el ceño ante su actitud. Le había advertido que una más y se iría expulsado, debe mantener su comportamiento. -Así que hasta entonces déjeme escuchar las canciones deprimentes que yo quiera, por favor. -Añadió sin importarle en lo más mínimo con una falsa sonrisa de amabilidad adornando su rostro, se colocó los audífonos nuevamente en espera de que Jake hiciera acto de presencia.

Y tal como esperaba, él entró por la puerta agitado, de inmediato lo vio buscar su butaca que ya era ocupada por Jungwon.

-¿Jaeyun, quieres sentarte aquí? -Le cuestionó Jungwon, el castaño negó eufóricamente ante la pregunta.

-¡Para nada, Jungwon hyung! Puedes quedarte con mi asiento, no tengo problema. -Le dijo con amabilidad mientras caminaba a la dirección opuesta a donde estaba Jay, lamentablemente sentándose atrás de Huening Kai quien según el pelinegro estaba seguro de que le coqueteaba.

Observó la dirección hacia donde se dirigía así que lo alcanzó para tomarlo de la manita sin importarle nada, rápidamente miró de manera fugaz que el maestro no estuviera presenciando la escena y con suerte no estaba prestando atención. Él estaba siendo sobornado con comida para que no pusiera trabajo.

-Siéntate aquí, Yun.

-Jay bebé, Jungwon ya está ahí. ¡No te preocupes! Estaré sentado detrás de Huening hyung. -Trató de convencerle señalando al chico pelimenta quien le saludó con entusiasmo cuando notó la mirada de Jake sobre él.

Se giró observando a Jungwon y sin ninguna pizca de tacto le soltó un:

-Lárgate.

-Claro, no tengo problema...con eso.— Le respondió colocándose de pie para tomar su mochila, Jake negó indicándole que se sentara.

-¡Jay! Deja que Jungwon se siente, ni siquiera estaré tan lejos. -Jake protestó en un sucio chantaje de convencerle con besitos en la barbilla, Jay frunció el ceño enfadado cuando el mocoso de su novio se soltó del agarre yéndose.

Tomó su propia mochila colgándola en su hombro y después corrió para alcanzar a Jake tomándole de la manita de nuevo, se sentó detrás de Heeseung e hizo que Jake se sentara a un lado de él.

El castañito se sonrojó de manera adorable porque aunque muy apenas encajaban ambos en el asiento, Jay no quería ser apartado de su terroncito.

-¿Ves? Aquí estamos cómodos ambos.

-Pero si tú estás a nada de caerte del asiento, Jay-ah.

Huening Kai soltó un quejido cuando "sin querer" Jay le soltó una patada por debajo de las butacas.

-No sabía que el asiento era para dos personas, joven Shim.

-Se le dice asiento compartido.

El profesor chasqueó su lengua irritado ante su ironía y le dió la indicación a Jay de que volviera a su lugar, el joven accedió bufando y dándole un besito en la mejilla a su novio antes de dejarlo.

-Bien, comenzaremos con la clase. Saquen su libro de cálculo en la página veinticinco.

Horas después.

# HORA DEL RECESO.

-¡Y entonces le dije a mamá que yo no quería ese helado de pistache y me dijo que tú debías comprarme desde ahora todos los helados porque ella ya no lo hará más! ¿Puedes creerlo? -Se quejó el castañito lloriqueando mientras Jay lo miraba atento a lo que decía, ¿Acaso Jake fue actor de dramas en otra vida o algo por el estilo?

-No uses excusas, mejor dime directamente que quieres acabar con mi cartera.

Jake lo miró con sus ojitos llenos de indignación.

-¡No es excusa! Pero está bien, quiero un helado de pistache en la salida, hyung tacaño. -Él dijo esbozando un adorable puchero, Jay frunció el ceño indignado también ante sus palabras -Dame un besito, soy adorable.

El jugador de hockey no dudó en complacer al pequeño mocoso malcriado, soltó un gruñido antes de depositar un pequeño y corto besito en sus suaves labios. Jake soltó una risita al ver directamente el rostro de su novio como si tuviera algo.

-¿De qué te ríes, mocoso?

-¡Te pusiste rojito, Jay!-Él dijo entre pequeñas risas para luego después de segundos enfadarse tiernamente ante el apodo, le dió un leve manotazo en el pecho al pelinegro. -No puedes decirme mocoso, tienes que llenarme de palabras bonitas y de amor.

Jay se rió con ganas tomando la manita de su chico para entrelazar sus dedos.

-¡Aigoo! Soy como un bebé! ¡Si no me das atención entonces lloro!-Siguió quejándose entre lloriqueos y se soltó de las manos entrelazadas.

-Yo te doy atención. -Se apresuró a responder el mayor mientras fruncía el ceño por quinta vez en el día, le tomó la manita de nuevo no contento con que la retirara.

-Entonces dime algo bonito.

-Me caes menos mal que todos en esta horrorosa escuela.

-¡Jay bebé! Eres adorable, también te amo. -Soltó un chillido tirándose encima de él para atacarle con besitos y abrazos que claramente el contrario recibió encantado.

Pasó sus manos por la cintura de su noviecito Jake correspondiendo su cálido abrazo, algunas chicas los miraban celosas, otras con admiración. Los chicos miraban con burla y otros con aburrimiento.

¿Acaso su relación es muy extraña?