30 Días OTP (Mikeno) **Terminada**

Día 17: Abrazos y acurrucos (Mimos)

Narro yo:
Al separarse, el .exe estaba más sonrojado que a lo que se acostumbraba a estarlo; Mikellino lo vió con ternura...

Mikellino: Awww pareces un pequeño jitomatito *le acaricia sus mejillas*

Mike.exe: No hagas eso, m-me da pena *se separa*

Mikellino: Je, no debería, estamos aquí solitos

Mike.exe: ¿Y Trolliela?

Mikellino: Debe de estar leyendo en su habitación

Mike.exe: Está bien... M-mikellino, t-tengo un poco de hambre

Mikellino: ¿En serio? Vamos a la cocina entonces *lo agarra de la mano y se lo lleva*

Ambos hicieron la cena de ese día y en ocasiones, Mike.exe se pegaba a la espalda del mayor, restregando su cara en su playera...

Mikellino: Je, ¿Estás bien?

Mike.exe: Si, ¿Por qué? *abrazándolo*

Mikellino: Porque no te has separado de mi desde hace más o menos 10 minutos

Mike.exe: ¿Te incomodo?

Mikellino: No, para nada *le acaricia sus manos y brazos* Siento que soy un peluche

Mike.exe: Uno gigante *entrelaza sus dedos a los del mayor*

Mikellino: Te amo, cachorro

Mike.exe: Y yo a ti, maldito poste

La cena se realizó con éxito y Mike.exe después de ayudar a Mikellino con la limpieza de la cocina, él se fue de ahí a su dimensión...

~~•Con Mike.exe•~~

Mike.exe: Buenas noches *llegando feliz al comedor*

Hacker: Buenas noches, ¿Por qué tan feliz?

Mike.exe: No sé pero ahora quiero hacer un escrito para Mikellino, hecho por mi *se sienta en una silla y sube sus pies a la mesa*

Hacker: ¿En serio? ¿Y cuál vendría siendo tu idea principal?

Mike.exe: Tendría que dar un paseo por la dimensión, para ver en que enfocarme

Hacker: Mmm está perfecto, me alegra que vayas progresando en este tema con Mikellino

Mike.exe: Él tiene buenos sentimientos y un corazón de oro; no quisiera rompérselo

Hacker: Tienes razón, si quieres puedo ayudarte en algo

Mike.exe: No tranquilo, lo quiero hacer solo

Hacker: Cualquier cosa no dudes en consultarme, ¿Si?

Mike.exe: Por supuesto

Hacker: *bosteza* ¿Puedo irme a dormir ya?

Mike.exe: Claro

Hacker: Gracias *se levanta* Con permiso y buenas noches *se va a su habitación del castillo*

Mike.exe: Ajá *se levanta de su silla y va a la cocina*

El .exe revisó las alacenas de ahí pero no eran iguales a las de su pareja; ahí no había del chocolate amargo que tanto le gustaba.
Siguió buscando con la esperanza de encontrar al menos un granito pero nada, eso hasta que un ruido de envoltura lo interrumpió haciendo que volteara...

Mike.exe: ¿De d-dónde sacaste eso?

Riumba.exe: ¿De dónde más crees? De la casa de Mikellino *le da una mordida al chocolate* Está delicioso, ¿No es así?