Tinys [Karmaland] OS

✈️Rubegetta✈️

La despedidas son tristes, ¿cierto?
Bueno, Rubén ya se había acostumbrado a ellas y para le eran totalmente normal, no le dolían ni tampoco lloraba por ello. Pero no entendía porque ahora sí le afectaba... Tal vez, porque su mayor temor se hizo realidad....

Desde que tenía memoria nunca tuvo un hogar establecido, su vida siempre fue un caos, ciudad tras ciudad, viaje tras viajar ero lo único que el pequeño Rubén conocía

Su madre era aún mujer de negocios, que se había esforzado por sacar a delante a sus hijo después de que su marido la abandonó
No tenía tiempo de llorar y rogar para que volviera a sus brazo, se creía completamente dependiente de si para darle un hogar a su pequeño Rubén
Es por eso que había logrado entra a unas de las empresas más prestigiosas del país, más bien, la constructora más grande de España que claramente especializaba en construcción de edificios de cualquier tipo que se le encarga y al ser tan reconocido era licitada sus servicios en otro países

Los primero años de vida que Rubén nació, su madre dedico a escalar y escalar hasta que se convirtió en unas de las grande accionistas de dichosa empresa
Lo que llevo que a que requiriera de ella en varios lugares
Así es como a la edad de 4 años el pequeño Rubén empezó a viajar por el mundo

De no tener nada, lo tenían todo, pero el costo estaba siendo muy alto
No tenía amigos, y a pesar que su madre siempre se encontraba a su lado, no la sé tía presente... Se sentía solo

Y para fortuna de la señora Gundersen lo había notado, quería que su hijo tuviera una vida normal, que su hijo aprendiera socializar y atener amigo, claro que también quería estar con el, pero no podía hacer todo, así que mientras ideaba un plana para darle lo mejor a su hijo, opto por contratar una Nana y así su hijo se pudiera quedar en su hogar seguro, teniendo una vida normal.

A la edad de 11 años Rubén tenía vida estable iba a la escuela y conocía personas, pero aún tenía sin tener amigo
Más que nada porque creía que todo volviera hacer igual en algún momento.

Así vívido por mucho tiempo, encerrado en su mundo, solo haciendo "amigos" por internet, dónde conocía a mangel, su "amistad" solo se basaba en jugar uno que otro videojuego y comentar películas
Cualquiera diría que eran amigos, cualquiera excepto Rubius...

Pero de la persona que menos se esperaba le abrió los ojos...

-Tu eres nuevo aquí?-

-Ah?- Rubén se encontraba afuera de su casa. Su nana lo había obligado a salir y dejara esos aparatos electrónicos, que para su vista eran inservibles; quería que socializará con personas reales
Y es por eso que se encontraba regañadientes afuera de su hogar

Lleva una hora afuera sentado en los que podría ser la banqueta enfrente de su casa y ni había visto ningún movimiento ni persona, no hasta que un pequeño pelinegro se poso frente a el, con su voz chillona y una pelota en la mano

-Wow! Siempre creí que este lugar está rodado de ancianos, pero ahora veo que no, si te acabas de mudar?, Nunca te había visto y eso que yo conozcas a todos las personas-
El pequeño hablaba con voz tan rápida y energética que le era tan difícil entender los que decía, pero de lo único de lo que entendió es que no se había visto

-No... Vivo aquí desde hace años...- no metía, desde de que tiene uso de razón su madre había comprado esa casa tan elegante y lujosa -Solo que mamá viaja y nunca estamos aquí-

-Interesante- El pequeño tomo su barbilla y pensativo lo observo -aún así nunca te había visto salir!-

-Casi no salgo- respondió muy cortante tratándome importancia, no sabía hasta dónde quería llegar el pequeño, pero intuía que querían que fueran amigos y en ese momento era lo menos que quería