Sugar || Taegi

05

Y así pasó el tiempo, Taehyung viviría su vida normal durante el día, solo para escaparse a mitad de la madrugada y jugar con Sugar a escondidas. Ya no le tenía miedo, después de que el unicornio le aclarara el porqué se su comportamiento. Diciendo que no podía mostrarse como realmente era ante los demás, porque, al ser alguien que no pertenece a ese mundo, no sería comprendido, mucho menos aceptado.

Hasta que un día, Sugar murió, en su décimo quinto cumpleaños. Taehyung había despertado y yendo como de costumbre a saludar a quien había sido su único amigo durante todos estos años, solo para encontrarlo completamente rígido, así como su corazón, el cual se habían detenido por completo.

—¿Sugar?

—Hijo...

—No, mi único amigo. —Taehyung se abrazó del pequeño animal —. No te vayas...

—Taehyung, tenemos que enterrarlo y...

—No, por favor, déjame con el. Quiero despedirme de mi amigo.

Su padre dudó pero finalmente acepto, adentrándose a la casa para dejar a su hijo con el animal inerte sobre el piso.

Una vez Taehyung se encontraba solo con Sugar, acaricio el pequeño cuerno que ya comenzaba a notarse sobre su frente, mientras se permitía drenar su dolor de la perdida mediante aquellas lágrimas que caían por sus mejillas.

—¿Por qué? —Preguntó Taehyung acariciando su pelaje —¿Por qué te vas y me dejas aquí, solo?

Taehyung cerró los ojos, se quitó las lágrimas con sus manos y justo cuando estaba por abrirlos de nuevo, lo escucho:

—¿Quién dices que murió?

Taehyung abrió los ojos de golpe al escuchar la voz de Sugar, dando un fuerte grito al encontrarse con un chico completamente desconocido frente a él.

—¿Quién eres?

—Soy yo, YoonGi.

—¿Pero cómo?, Tú estabas muerto.

—¿Te parece que estoy muerto?

—¿Cómo es que te volviste una persona?

—El proceso de transformación es algo complicada, quien no sabe de este proceso pensara que realmente he muerto.

—¿Transformación?

YoonGi asintió.

—Ahora soy realmente un unicornio por completo. —Sugar señaló su cuerno con orgullo.

Y solo entonces Taehyung se percató del enorme cuerno que el chico tenía sobre su frente. Pero no solo eso notó, Taehyung también notaría la bonita piel blanca y sin imperfecciones que tendría ese chico, así como sus bellas facciones.

«El ciertamente, era indudablemente hermoso ».

Taehyung sonrió.

—¿Me enseñarás como te ves ahora como un unicornio?

YoonGi asintió, solo para transformarse en un gran unicornio poco después.

—Hijo, ¿ya te despediste de Sugar?

—No papá, no tuve que hacerlo, el está completamente bien, ¿lo ves?

Taehyung señaló al unicornio, quien claramente había ocultado su cuerno para evitar levantar sospechas y su padre lo miró, completamente perplejo.

—Ya veo, supongo que eso es una buena noticia.

—Si. —Taehyung estuvo de acuerdo—.  Tengo hambre, y Sugar también, ¿que hay para cenar?

—Pasta.

—¿Me darías un poco?

—Claro.

—¿Y a Sugar?

Su padre miró de nuevo en dirección al patio y luego asintió.

—Por supuesto.