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Aquel aullido que se oía afuera de la casa de aquellos dos era insoportable. . . Bueno para todos los de aquel pueblo . . .
—¿a quien llamará ese Gatito?—Pregunto la Fémina para ver a El chico que estaba al lado de ella.
—No lo sé pero el me está dando inspiración para nuestro libro.
—Si al menos eso es bueno.
. . . Los que sentían que aquel aullido que no paraba era insoportable . . . Para ellos era música para sus oídos.
Aquel aullido era hermoso para sus oídos. Hermoso, era una maravilla, una anomalía aquel aullido era inhumano aquel aullido era Tan fuerte, y desesperado. podían sentír la angustia de aquel pequeño Gatito pero no lo soportaban. .No soportaban que estuviera sufriendo así que lentamente se paraban de las sillas y se dirigían hacia afuera de aquella pequeña cabaña con las luces apagadas. Aunque las luces estuvieran apagadas podían ver perfectamente. . . Casi como un Gato. . . mientras habrían la puerta lentamente el Gato se callaba.
—¿Porque callo?—Pregunto el Chico confuso.
—Sera porque tendrá miedo de nosotros?—Hablo la chica para salirse de aquella cabaña.
Los vecinos estaban algo lejos a unas cuadras de aquella cabaña. Pero había solo una cabaña que estaba al frente de la de los jóvenes.
Ellos Giraron para ver a los dos lados si veían al Gato.
Pero lo que vieron fue a el vecino que estaba enfrente de ellos.
