Our World

Capítulo 1: Realidad.

Fui corriendo a mi trabajó como de costumbre llegava trade y como de costumbre el jefe me riño, pero si quitarme los ojos de en sima el muy cerdo, me puse el uniforme, y empece a servir mesas y a limpiarlas, y a hacer todo lo que hace una camarera, era muy dificil mantenerme despierta, anoche también había tenido turno pero sin casi propinas realmente en todo lo que trabajo lo hago fatal, lo bueno es que algunos dueños de vares y cafeterías necesitan a una chica que se vea muy joven, y diga que tine más de 18, aunque aun no e cumplido ni los 16, y realmente estoy más que cansda de estar aguntando cerdos, pero realmente necesito el dinero.
De repente se escucho un ruido de vidrios rompiéndose, era yo se me había roto un vaso, por 3ra ves en la semana. Rápidamente mi jefe me llamó, me llevo a la cocina en donde me grito a todo pulmón como si de eso viviera, mientras que yo solamente dejaba que lo hiciera de todas formas, pasria como todas las veces, me daría otra oportunidad por ser joven.

-Lo siento mucho, lo siento mucho- repetí y repetí incluso si sabía que no me despidiria, le tenía mucho miedo.
-Niña no todo se resuelve con "lo siento mucho", realmente no se que vida de cuento de adas has vivido tu pero la vida real no es así- ¡VIDA DE CUENTO DE ADAS! ¡¿EN SERIO?! Este hombre no tiene la menor idea de la vida que he vivido, he visto cosas que quisiera nunca haber visto, e echo cosas solo por complacer a los demás pensando que tendría algún bien pero es todo lo contrario, pero apesar de lo enojada que estaba me calle- sin embargo tu vida podría ser más facil si arriesgaras algunas cosas, se acerco a mi e intento tocarme, pero retrocedí y le dije enojada.
-¡Me voy de aquí!- camine un poco y cuando estaba apunto irme de la cocina, el cerdo agró mi brazo y me dijo.
-Ni se te ocurra, tendras que pagar los vasos y platos rotos de una forma o otra mucha!-en ese momento para escapar de el jale mi brazo, pero acabe abriendo la puerta que conectaba la cocina con la sala de las mesas, y ahí mismo comence a griterle todo lo que tenía guardado por decirle.
-¡Sueltame cerdo asqueroso, me voy de aquí , ya estaba harta de aguntarlo, se perfectamente la cantidad de platos y vasos que e roto, pero eso no le da ni el minimo derecho de intentar tocarme, engendro repugnante, su cafetería, usted y sus uniformes, son todos repugnantes, y espero con ancias que esas muchachas que estan ahí- señale a unas meseras que estaban sirviendo aun estos momentos por miedo al "jefe"- se lo digan prontó a la cara y se libren de usted, y renunció!
-¡De eso nada me vas a pagar lo que debes, o de aquí no sales!- desarmo el moño que tenía echo y me jalo de el.
-Au, ayuda por favor- algunos meseros y clientes intentarón calmarlo, pero a el todos lo conocen por bomba, por ser de tan mal carácter. Empezó a gritar hasta que un hombre que tenía un traje de color negro, dijo.
-Señor y si pagra la deuda de la muchacha- dijo nervioso un hombre, era un hombre alto y delgado, que vestía de negro, estaba palido y con ojeras que se notaba muchisimo, para ser cinsera parecía un muerto, sus manos temblaban y se podía notar que estaba asustado, mientras yo veia al cerdo el no se movía y yo tampoco solo lo miraba desde abajo, temblando esperando que dijera que sí
-Ja, y por que pagarías la deuda de esta chiquilla.
-Usted quiere el dinero, ¿no, cuanto es?-dijo, mientras veia como una sucia sonrisa se dibujaba del odioso jefe, que además no tenía uno de sus dientes delanteros el derecho,se veia horible.
-Esta entre los 1000$, no es la primera ves está niña me a roto cosas.
-Mentira, máximo son 200$ solamente!-grite, no tenía que haber abierto la boca, pero me molestaba tanto ese tipo,
-Callate niña!-grito y alo de mi pelo tan fuerte, que sentí que me acabaría arrancado la cabeza.
-Pagre los 1000$, no importa, deja a la muchacha,- dijo el hombre de negro, y se dirigio a su maletín que es el mismo color de su traje, y saco de el los 1000$ de mi deuda.
-Aquí estan, la chica por favor-dijo mientras extendía la mano en la que llevaba el dinero y un poco más adelante de está, su otra mano, esperando para hacer el intercambio.
-Primero el dinero, no me voy a arriesgar.
-Idiota-pense y hubiera pereferido decírselo directamente.
-No tengo a donde uir, no va a haber riesgo-al escuchar eso me tiro como si fuera un saco de papas a los brazos del hombre de negro, y el hizo lo mismo con el dinero.

Después de darle las gracias al hombre que prácticamente me salvo la vida me fuy de ahí corriendo, no quería poner un solo pie en ese lugar de nuevo. Y cuando pensaba que ya todo había acabado. Y ya me habían "echado" de otro trabajo por mi "incompetencia", dos cosas que no eran ni tan ciertas. Sentí una mano agarando mi muñeca.

Tuve miedo, mucho miedo. No era un barrió muy seguro ya me había alejado un poco de la cafetería, y no tenía la menor idea de que hora era.

Afortunadamente cuando me vire era el, aquel hombre que me ayudo,

Pero acabo proponiendome un trato que realmete me condeno.

El capítulo no es muy bueno, o almeno no tanto como considero que son los otro. Si el capítulo se ve corto lo siento pero es hasta que las ganas y la imaginación se agote, chao comenten y boten si les gusta, y si no deja de leer pero no fastidies