All too well (Riren)

All too well

Cuando te conocí... demonios no tenía ni idea de lo que era el amor, tenía tan sólo 20 y a pesar de haber tenido parejas estas no habían sido algo serio, pero te conocí a ti, Levi, maldita sea, todo cambiaste, tenías 30 cuando nos conocimos...

-¿Eres real? -el castaño se acurruca en su pecho acariciando sus cabellos.

-¿A que te refieres? -sonríe besando su frente.

-No lo se... sólo siento que tal vez yo te estoy alucinando, eres como el hombre perfecto -lo abraza.

Recuerdo la primera vez que fuimos a casa de tu hermana... hacia demasiado frío, llegamos algo tarde para cenar pero aún así ella nos recibió muy alegre que de alguna manera se sintió como estar en casa. Levi... ¿lo recuerdas? Yo llevaba esa bufanda roja, esa que olvidé en su casa, sabes... aveces pienso que todavía la tienes guardada en algún cajón, es más, lo puedo asegurar...

-Mikasa... él es Eren -el pelinegro lo presenta- Eren, ella es Mikasa, mi hermana menor.

-Un gusto -alegre tomo la mano de su cuñada.

-Igualmente -corresponde- tomen asiento, la cena pronto voy a servirla.

-Te lo agradezco -se sienta al lado de su novio.

-Te ves muy bien esta noche -besa su mejilla a lo que Eren se sonroja.

An Upstate Scape

La manera tan dulce de hablarme, me hacía sentir tan especial, como si flotara, nos entendíamos a la perfección, todo el tiempo me mirabas a los ojos diciendo que encontrabas ahí un universo hermoso.
Reíamos juntos cada vez que íbamos en tu auto de paseo a las afueras del pueblo, cantábamos a todo pulmón esas canciones de antaño mientras nos íbamos perdiendo en el norte rumbo a lo desconocido, al llegar a un lugar apartado... salíamos a contemplar las hojas de otoño cayendo, caminábamos hacia el lago y nos sentábamos en la orilla para hablar durante horas, puedo recordar esos momentos hasta ahora, pero... se que eso fue hace ya mucho tiempo y la magia de esos días ya no están aquí más.

-Te amo -toma su mano entrelazando sus dedos mientras observan el atardecer cerca al lago de aguas cristalinas.

-Yo también, como no te imaginas -sonríe mostrando sus blancos dientes- no quiero que esto te termine.

-Te aseguro que durará mucho tiempo -el mayor se levanta y lo toma entre sus brazos.

-¿Qué haces? -se aferra a su cuello.

-Vi un cúmulo de hojas antes de venir al lago -ríe y lo lleva al lugar para recostarlo- eres precioso.

-Levi... -sus mejillas se tornan rojas y procede a besarlo de manera tímida.

-Tranquilo -pasa su mano por el holgado sweater del castaño- sólo quítatelo -Eren asiente.

-Tu tanto hazlo -nervioso le retira la chaqueta.

Y creí que todo estaría bien en esos momentos pero me equivoqué, pero míranos de nuevo paseando por ese pequeño pueblo mirando las casas antiguas a través de la ventana, una vez casi te saltas una luz roja por contemplar como mi cabello se movía cuando el viento lo acariciaba, yo... estaba ahí... lo recuerdo muy bien.

-Ojos en la carretera tonto -le saca la lengua divertido.

-Ya lo se, mocoso -rueda los ojos y vuelve a mirar la autopista con una media sonrisa en su rostro.