"Donde Hyunjin es el chico malo y jodido con demasiados problemas. Jeongin es el niño rico perfecto, con demasiado dinero, sus escuelas están justo en frente. Se reúnen en una fiesta y eso es lo último (y tal vez lo único que necesitan)."
民› Hyunjin...
Cuando Jeongin se despertó a la mañana siguiente, Yoon no estaba en la cama. La encontró en la sala de estar, sentada en el sofá entre Hyunjin y Felix, comiendo el desayuno, que probablemente, había ordenado.
Todo el mundo ya estaba allí, vestido con la ropa de la noche anterior, con aspecto cansado.
"Buenos días." Le dijo a nadie en particular y todo el mundo lo recibió de vuelta con la boca llena.
Jeongin encontró su lugar al lado de Min en el lateral de la butaca. Escogió un mollete de chocolate de la meseta llena de dulces y frutas.
Jeongin comió, tratando de no hacer contacto visual con Hyunjin. Se sentía un poco raro por lo que había sucedido la noche anterior, al igual que se sentía días después de que Hyunjin lo hubiera hecho venirse. Pero se desvaneció con el tiempo, porque el mayor estaba actuando como de costumbre, haciendo burlas durante el desayuno y bromas.
Cuando Yoon les dijo que había tenido el mejor sueño de las últimas semanas, Hyunjin hizo contacto visual con Jeongin y le guiñó un ojo, mordiéndose el labio.
Jeonginno pudo reprimir la sonrisa que apareció en su rostro y Yoon sonrió porque pensó que la sonrisa era para ella.
"Entonces, ¿qué harás para tu cumpleaños Jeongin?" Preguntó ella mientras bebía lo que quedaba en el vaso de jugo de naranja.
"Tenía pensado hacer una fiesta en el hotel de mi tío." Él respondió y Felix asintió con entusiasmo.
"Pero va a ser un día antes de mi cumpleaños, el 23, porque mis padres me quieren en casa para la cena de Nochebuena."
"¿Tu tío es dueño de un hotel?" Changbin preguntó sorprendido y Jeongin asintió.
"Del St. Paul".
"Ese es el más caro en Corea" Hyunjin habló.
"Por supuesto que lo es."
Terminaron el desayuno a los quince minutos, y al mediodía se fueron. Y si, Jeongin informó que una mujer en la puerta se había acostado con un cliente, pues bien, ese no era su trabajo.
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La próxima semana tuvo dos pruebas. Yoon se quedó casi todas las noches, y a Jeongin no le importaba el hecho de que todo lo que hicieron antes de dormir fue tal vez nada. Rara vez se dormían abrazados y Jeongin estaba bien con eso.
No sabía si debía sentirse culpable por el hecho de que Hyunjin le había hecho irse y viceversa, o porque no se sentía culpable en absoluto.
No había visto a Hyunjin desde el día del baile, y para ser honesto, estaba un poco nervioso acerca de su fiesta de cumpleaños. Iba a comenzar dentro de dos horas, y sabía que Hyunjin iba a venir, y que todo el mundo tendría su propia habitación de hotel.
La madre de Jeongin había ordenado su traje de Dolce Gabbana y el estaba emocionado porque lo llevaba, y porque era el más caro. Era muy suave y los zapatos hacían juego, con una camisa negra muy agradable con cuello blanco. Llevaba el pelo en una franja suave y no podía estar más emocionado.
