|| LULLABY || melanie martinez

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Who is her?
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Lucrecia se levanta sintiendo el frío impactar contra su cuerpo, aún no tenía una cama propia y dormía en una bolsa de dormir en el suelo del altillo. Se levantó y agarró una de sus cinco remeras y un pantalón para acudir a la escuela. Al bajar rezaba para que la señorita Frida aún estuviera donde sea que iba por las noches. Agarró una manzana y su mochila, si bien no estaba llegando tarde, los encuentros con Frida no eran los mejores. Salió de su casa (si es que así podía llamarla) y miró al cielo, completamente nublado, cosa que no ayudaba en nada. Maldijo en silencio y empezó a caminar hacia la escuela. Había estado en una escuela antes, allí nadie le hablaba, nunca tuvo alguien con quien hablar, siempre fue muy timida. La escuela se asomaba entre las calles con un gran cartel indicando el nombre de ésta. "Baldwin High School", su nuevo infierno.

[...]

Caminaba entre los pasillos sin un rumbo fijo. Cada alumno estaba tan absorto en sus pensamientos que no notaban otra cosa. Me dirije a la secretaría pasando por todos los casilleros azules preguntandome cuál sería el mio. Al llegar a la secretaría toque la puerta con los nervios a flor de piel. No solía hablar con personas, y para no tener problemas, tenía que causar una buena impresión. Toqué la puerta y un "pase" se escuchó del otro lado. Allí se encontraba una señora mayor con el pelo amarillo y lentes marrones.

- Buenos días, soy nueva en la institución. Mi nombre es Lucrecia Johansson - Al finalizar sonreí, parecía que estaba acostumbrada a estas situaciones, ya que tenía todos mis horarios listos.

- Si, tu madre vino y escojio tus materias - En ese momento entró una chica pelirroja de lindos ojos prácticamente corriendo - Kiara, no porque sea tu abuela puedo aguantar estas faltas de respeto en la institución - La mujer tenía un seño fruncido y ahora se dirijia solo y plenamente a la chica que acababa de llegar.

- Perdón abuelita. Me podrías dar una copia de mis horarios - Se la veía nerviosa - Por favor.

- Por supuesto - Mientras imprimia la copia, me extendió mis horarios - No los pierdas, Kiara como es tan amable te dará un recorrido por la institución, ¿no es así? - Tomé la hoja que me extendió y le dió su respectivo papel a Kiara.

- Si abuela - Dijo con algo de pesar en la voz.

Apenas salimos de allí respiré en paz, aquella señora no parecía una mala persona, pero su cara de enojada con todas aquellas arrugas le daban un aspecto aterrador.

- Disculpa que hayas tenido que ver eso. Mi nombre es Kiara Virna. Bueno, nunca hice recorridos, pero supongo que será una buena experiencia mientras no nos crucemos con Josephine y sus amigos - Dicho esto me agarró del brazo y me empezó a guiar por el lugar - Sólo no te separes de mi -

- Me llamo Lucrecia, quien es esa Josephine? - Mientras me guiaba por los pasillos parecía bastante alerta.

- Lucrecia... Te voy a decir Lucre si no te molesta. Y a Josephine ya tendrás tiempo de conocerla. No suele molestar a los nuevos sin motivo, así que no te preocupes, pero apuremos el paso - Empezamos a caminar mas rápido

No era muy diferente a mi antigua escuela. La verdad que eran prácticamente iguales, solo que todas las aulas y salones estaban en diferentes lugares. La campana sonó y ambas nos tapamos los oídos.

- Es normal que haga eso? - Si tenía que aguantar esto todas las semanas durante ocho meses, los oídos me empezarían a sangrar.

- La verdad que si, no te acostumbras nunca, y eso que yo vine acá toda mi vida. Que clase tenés ahora? - Miró su papel y yo me fijé en el mío.