Tatuajes Del Alma (TOTS. Nueva Edición)

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Aquí nuevamente con ustedes el primer capítulo de la nueva edición de TATUAJES DEL ALMA:3
Me complace anunciar que la nueva edición estará mucho mejor narrada y con menos escenas aburridas y que no aporten casi nada a la trama. O así yo lo veo, además, aclaro que no está editada en sí totalidad, por si encuentran algún fallo..
No actualizaré constantemente, pero sí es seguro que lo haré, so, no me abandonen je, ya que este proyecto me emociona muchísimo.
¡Ahora sí! Solo me queda decir que disfruten a aquellos que me leen y por favor, respetar mi trabajo.
Voten y comenten, también compartan con sus amigos:3 (No, éste apartado estará al final de los capítulos, está es la excepción, so, don't be upset)
Love for u!

[29 de Agosto]

Miraba por la ventana del departamento, mientras Darren, mi mellizo, bajaba las pocas cajas con mis pertenencias para dejarlas en su auto.

Estaba un poco decepcionada por tener que dejar éste lugar, lo había conseguido hace poco y ya debía abandonarlo por un infortunio incidente provocado por esos delincuentes. Mis deseos de valerme por mí misma se fueron por la borda; mi hermano no me dejaría seguir viviendo sola en este departamento después de lo ocurrido... y amaba eso, siendo honesta, un chispazo se encendió en mi pecho cuando no dudó ni un segundo en decirme; "Quiero que estés a salvo... vendrás conmigo".

Me abracé a mi misma dejando mi mente vagar en el recuerdo de la noche del viernes 13 de Agosto...

"Dejé escapar un suspiro de mis labios al sentir mi cuerpo hundirse en el agua tibia de la pequeña tina. Había tenido un día largo, presentando mi documentos en la universidad para el inicio del cuatrimestre y llendo de tienda en tienda comprando los materiales necesarios para mis clases. De igual forma había sido un día provechoso.

Luego del baño, cubrí mi cuerpo con una toalla. A medida que camina mis pasos dejaban charquitos de agua en el piso de madera y mi cabello goteaba, dejando gotas en mi espalda. De repente, el entorno de mi propio departamento me dejaba una sensación de inseguridad e incomodidad.

Miré la pequeña sala de estar que era separada de la cocina por la encimera de ésta última. El ambiente me parecía sombrío y pesado. Decidí ignorarlo y fui a mi habitación.

Me sequé y vestí con mi correspondiente pijama; camiseta extremadamente grande y shorts de tela fina. Decidí ir a la cocina y prepararme algo sencillo para cenar, estaba agotada y sólo quería descansar.

Untaba la mermelada en la tostada de forma lenta y precisa, deseaba que fuera perfecto. Como siempre. Un chirrido me sacó de mi burbuja perfeccionista y me giré a ver la sala.

Al ver la figura encapuchada y aterradora de pie en mi sala, el pequeño cuchillo que utilizaba cayó de mi mano debido al temor, causo un sonido estridente generando un escalofrío en todo mi cuerpo.

Mentiría si dijera que no tenía miedo, estaba paralizada en mi lugar, juraría que incluso el tiempo se detuvo en esa mínima de segundos.

El sujeto de gran tamaño desenfundó el arma, se deshizo del seguro y apuntó. Eso sirvió para sacarme de mi paralización y empezar a hiperventilar. Estaba aterrada por lo que pasaría.

—Te quiere devuelta... —negué con la cabeza—. Son órdenes.

Mis ojos ya lagrimeaban. En un impulso de valentía o estupidez; corrí en dirección a mi habitación, pasando junto a él y fallando en el intento.