♡The King's Consort♡

Se acabó Tharan.

Tay Tawan, ese fue el nombre que escogió la pareja cuando hablaron de tener hijos, si era un niño le llamarían Nanom y si era una niña sería Gigie. La pequeña era fuerte y tranquila, y New no podía dejar de admirar lo hermosa que era, era el vivo retrato de Sehun.

—¿Cómo está mi pequeña? ¿Tienes hambre? —Gigie llevó uno de sus dedos a su boca y New sonrió derritiéndose de amor por su hija.

—¿Puedo pasar? —preguntó Gulf desde la puerta.

—Si, si pasa por favor —New se acercó y lo ayudó a sentarse.

—Quería ver a la niña.

—Deberías estar descansando Gulf, el médico fue claro y dijo que debías mantener reposo.

—Me siento bien, aparte estoy cansado de estar acostado, es aburrido pasar el día encerrado en esa habitación.

—Lo entiendo, pero no abuses.

—Te prometo que no lo haré, ¿pero la puedo cargar? —New le entregó a la pequeña y Gulf sonrió.

—Hola princesita hermosa, soy tu tío Gulf y quiero que sepas que te cuidaré mucho —los ojos de Gulf se llenaron de lágrimas —tu papá estaría feliz de verte.

—¿Gulf? —el doncel alzó la mirada.

—Lo siento, no quise ser imprudente, pero lo extraño demasiado.

New acarició la espalda de Gulf —no te disculpes, sé lo mucho que ambos se querían.

Gulf sintió dolor en su vientre, las contracciones habían comenzado y con ellas el trabajo de parto.

—Duele —New tomó a su hija para dejarla en su cuna mientras salía en busca de los guardias.

—¡Llamen al médico! El hijo del rey ya va a nacer.

Todos se movían de un lado a otro mientras New llevaba a Gulf hasta su habitación.

—Dile a Mew que venga, no quiero estar solo —un nuevo grito lleno de dolor escapó por los labios del doncel —por favor llámalo.

—No te preocupes, iré por él.

New dejó a su pequeña con una de las sirvientas mientras él iba a la oficina del rey.

—Permiso su Majestad.

—¿Qué haces aquí? ¿Pasó algo con tu hija?

—No, es su hijo su Majestad, ya va a nacer.

Mew de un brinco se levantó de su silla y salió corriendo del lugar, había esperado tanto ese momento. Cuando el rey entró, Gulf ya estaba siendo preparado por el médico para recibir al bebé.

—Mi luna.

—Mewmi tengo miedo —el doncel se aferró a la mano de Mew.

—Todo estará bien, no tengas miedo, ya estoy aquí contigo —Gulf se sintió más tranquilo al ver a Mew a su lado.

Después de un arduo trabajo por parte del médico y también del doncel, el pequeño niño nació saludable y fuerte. Gulf estaba agotado, pero aun así fue el primero en cargar a su hijo.

—Se parece mucho a ti mi luna.

—¿Tú crees?

—Si amor, es tan hermoso como tú y me siento agradecido de que tú seas su padre y que todo haya salido bien —ambos admiraron a su pequeño de ojos brillantes.

—Si me permiten quiero revisar al pequeño —el médico controló al bebé mientras Mew se encargaba de cambiar la ropa de Gulf.

—Déjame ayudarte —Gulf se dejó ayudar por Mew, estaba demasiado cansado como para negarse —te llevaré a nuestra habitación, allá podrás estar más cómodo —Mew con cuidado lo tomó en brazos y lo cargó hasta la otra habitación —¿te sientes bien?