Árbol gris. Crece, y alimenta esta oscura sombra de la que estás hecha, alzándote a costa de la pena y llanto que tan constantes te han alimentado.
Crece, y aumenta tu dolor, tu contorno, tu figura. Ramas que de forma piadosa al cielo un poco de paz claman, que aun sin respuesta ven turbado su mundo arriba, no sabiendo a donde mirar, ni ver, ni llorar.
Creces, más y más cada día, no cesando la búsqueda de cuales frutos tu sombra crece, donde infinitamente parece estar aprovechada.
Árbol gris con matices negros, para una vida gris con momentos negros.
ESTÁS LEYENDO
Memorias de un momento gris
De TodoRecopilación de escritos hechos en aquellos momentos de los que uno prefiere no hablar.