"La meta de un traicionado"

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Narrador

Las palabras de Taiju hicieron eco en la cabeza del rubio que estaba acostado en la camilla del hospital, no había ningún tipo de reacción al escuchar esas palabras, no se explicaba para si mismo el porque ese tipo que estaba al frente de el y se retiró con esas palabras le ofrecía el entrenarlo…algo debería estar tramando ese maldito orangután…pero después le sacaría la verdad

Takemichi: Naoto…ya no tendrás que preocuparte del que yo vuelva a salvo al futuro, no volveré más-dijo mientras miraba su mano que ahora tenía unas pequeñas cicatrices y la apretaba con algo de fuerza llenándose de determinación

Él ya tenía una decisión tomada, desde ahora el ya no sería el héroe llorón que siempre fue para los ojos de los demás, si no que se volvería la persona que buscaría tomar una propia venganza con sus manos a punta de golpes y esfuerzo…el sería el villano que desde un principio tenía que haber sido

Takemichi: Ahora a pensar…como me escapo de aquí si tengo las piernas rotas, la silla de ruedas sería una molestia para bajar escaleras, pero está el ascensor, evadir las cámaras de seguridad será un problema…valla estupidez de plan que se me ha ocurrido-dijo mientras que apoyaba su cabeza hacia atrás para poder pensar de mejor manera las cosas, ahora solo quería estar solo un rato

Para el rubio el día pasaba lento, no tenía ningún tipo de entretención en esa habitación blanca más que solo hablar con el mismo como si estuviera loco, pero eso no le interesaba tener algún tipo de entretención ya que en cada momento que pasaba solo planeaba el como escaparse de ese hospital para poder entrenar con Taiju, no tenía clara las intenciones del Shiba mayor pero tampoco le interesaba saberlas, esta noche trataría de marcharse sin decirle a nadie

La noche llegaba por fin a la ciudad de Tokio, llenando de silencio el hospital en donde estaba internado Takemichi, el rubio miraba la hora de manera repetitiva, por unos pocos rumores que escuchó y conversó con algunos empleados sabía que el guardia que hacia el turno de la noche se iba a los pisas de arriba a las 22:00 y volvía a su piso a hacer su recorrido a las 23:30, eso era tiempo suficiente para irse de ahí

Cuando el reloj de su habitación marcó las 21:58 el con mucho esfuerzo con sus brazos pudo sentarse en la cama y tomar las sillas de rueda que estaba al lado de la cama, usando más fuerza en sus brazos logró sentarse en la silla

Takemichi: Ya es hora-dijo mientras que empezaba a mover la silla hacia la puerta tratando de hacer el menor ruido posible y evitar llamar mucho la atención ya que puede que el turno del guardia se haya retrasado o algo parecido

Cuando estaba a punto de abrir la puerta escuchó un sonido como si fueran varios golpes impactando en algo o en alguien, incluso escuchó un mediano quejido de dolor, quizás qué demonios estaba pasando afuera, tomó la perilla de la puerta, pero antes de abrirla esta fue violentamente abierta por la persona que de seguro golpeó al guardia conociéndolo de manera indirecta y conociendo su temperamento

Taiju: Eres un puto retardado, me haces venir por ti solo porque eres muy débil para librarte tu mismo de estos guardias idiotas-dijo mientras que lo miraba de manera sería y una sonrisa psicópata

Takemichi: Será que lo único que me queda es el silencio para poder irme de aquí, tengo las malditas piernas rotas y solo tengo un ojo para ver en este momento mientras se cura el otro-dijo mientras que miraba con una mirada vacía a la cara psicópata del hermano mayor de los Shiba-Ahora que

Taiju: Nos vamos de aquí que más idiota-dijo mientras que sacaba con mucha fuerza la silla del rubio que se aferró a ella para no caerse debido a la fuerza con la que fue tirado-Ahora date prisa

"Las personas buenas....no siempre son recompensadas" [HIATUS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora